La explosión de un coche bomba conducido por un kamikaze dejó al menos ochos muertos. Varias decenas de personas resultaron heridas.
El ataque se produjo cerca del mausoleo chiita de Sayeda Zeinab, en las afueras de Damasco, a unos 17 kilómetros al sur de la capital siria.
El número de muertos ascendería a cinco, según la agencia oficial siria Sana, y ocho según el balance de víctimas difundido por el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH).
Por su parte, un testigo citado por EFE, señaló que vio en el lugar del ataque al menos diez cadáveres y decenas de heridos.
El estallido del coche bomba se produjo en la zona de Sayeda Zeinab, que las fuerzas de seguridad cercaron por temor a más atentados.
La autoría del ataque no fue reivindicada, pero el santuario, que abriga el mausoleo de una de las nietas del profeta Mahoma, ha sido el objetivo de otros ataques de extremistas sunitas del grupo Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés), que consideran a los chiitas como herejes.
El pasado 22 de febrero, al menos 120 personas, en su mayoría civiles, perdieron la vida por cuatro explosiones en la misma zona.