Los representantes republicanos fracasaron el martes en su intento de iniciar un proceso de juicio político contra el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, viéndose obligados a archivar —al menos por el momento— una de sus prioridades después de que algunos legisladores republicanos se rehusaron a seguir el plan del partido.
El sorpresivo resultado se quedó a un solo voto de iniciar un juicio político contra Mayorkas, estancando el intento de los republicanos de castigar al gobierno federal por su manejo de la frontera sur del país. Ante el frente unido de los demócratas contra los cargos, los republicanos necesitaban casi todos los votos en su estrecha mayoría para aprobar los cargos de juicio político.
En una caótica escena en el pleno de la Cámara de Representantes, la votación permaneció empatada 215-215 durante varios minutos. Varios legisladores republicanos —encabezados por el principal promotor del juicio político, la representante Marjorie Taylor Greene— rodearon a uno de sus colegas que se negaba a seguir con el plan, el republicano por Wisconsin Mike Gallagher, quien se rehusó a cambiar su voto.
Cuando el conteo permaneció estancado, los demócratas exigieron que se cerrara la votación.
“Frustrado”, dijo el representante republicano Mark Green, presidente de la Comisión de Seguridad Nacional, “pero lo volveremos a ver”.
Raj Shah, portavoz del presidente de la cámara baja Mike Johnson, dijo que “tienen toda la intención” de reconsiderar los cargos de juicio político contra Mayorkas “cuando tengamos los votos para su aprobación”.
Pero existe una enorme incertidumbre sobre sus siguientes pasos. Al final del día, tres republicanos se negaron a llevar a Mayorkas a un juicio político, y un cuarto cambió su voto a fin de que se pueda reevaluar la medida. El conteo final fue 214-216.
El resultado fue otro traspié para los representantes republicanos, que en repetidas ocasiones han sido incapaces de aprovechar su mayoría para alcanzar objetivos políticos.
Johnson, quien sólo podía darse el lujo de perder unos cuantos votos de la mayoría republicana, había dicho previamente que había hablado personalmente con Gallagher y otro disidente para conseguir su apoyo.
“Es una medida extrema”, dijo Johnson. “Pero tiempos extremos requieren medidas extremas”.
Ningún secretario del gabinete enfrentaba cargos de juicio político desde 1876, y es la primera vez que un secretario en funciones se enfrenta al procedimiento. Hace 148 años, el secretario de Guerra William Belknap renunció poco antes de la votación.
Las acusaciones contra Mayorkas se producen en un momento en el que la seguridad fronteriza se está convirtiendo rápidamente en un tema político relevante rumbo en las elecciones de 2024, una línea de ataque particularmente delicada contra el presidente Joe Biden, encabezada por el expresidente y posible candidato presidencial republicano Donald Trump.
Cifras históricas de migrantes han llegado a la frontera sur, muchos de ellos huyendo de distintos países de todo el mundo, en lo que Mayorkas describe como una era de migración global. Muchos migrantes piden asilo y se les libera condicionalmente en Estados Unidos, donde llegan a ciudades que no están preparadas para brindarles albergue y demás asistencia mientras esperan un proceso judicial que puede tomar años para determinar si pueden permanecer o no en el país.
Fuente: AP