Donald Trump ratificó la nueva política sobre el régimen iraní que el secretario de Estado Rex Tillerson había anunciado horas antes.
Según denunció Trump, el régimen iraní ha cometido múltiples violaciones del pacto nuclear acordado por EEUU y los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU (Estados Unidos, China, Rusia, Francia y Reino Unido) más Alemania. “Irán no está a la altura del espíritu del tratado”, criticó.
“Cuál es el propósito de un tratado que sólo retrasa la capacidad nuclear de Irán por poco tiempo. Como presidente de EEUU esto es inaceptable”, dijo luego de un recuento histórico sobre las amenazas que supone el régimen.
El mandatario, que denunció el comportamiento de “la dictadura iraní” en Oriente Medio, advirtió que en cualquier momento puede abandonar el acuerdo alcanzado en 2015 y que no lo certificará. La decisión, hace que futuro del pacto quede ahora en manos del Congreso.
El mandatario afirmó que si no se logra corregir los “defectos” del acuerdo nuclear con Irán mediante la acción del Congreso o negociaciones internacionales, abandonará el pacto. “En caso de que no podamos llegar a una solución, el acuerdo será cancelado”.
Aunque no abandone el acuerdo, el giro estratégico de Trump puede abrir un período de incertidumbre al no secundar la posición de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), quien hasta ahora ha confirmado que Teherán cumple sus compromisos.
El pacto sobre el programa nuclear iraní, suscrito el 14 de julio de 2015, permitió que se levantara una parte de las sanciones internacionales impuestas a Teherán.
Firmado en Viena, el Plan Global de Acción Común (PGAC) preveía un levantamiento progresivo de las sanciones a cambio de la garantía de que Teherán no se iba a dotar del arma atómica. Teherán se comprometió a reducir sus capacidades nucleares (centrifugadoras, reservas de uranio enriquecido…) durante varios años.
Fuente: Infobae.com