“Las imágenes no mienten, ese era yo. Yo estuve, yo visité casinos, pero el detalle es que la acusación es de una carta anónima que llegó, la acusación dice que yo me jugaba el dinero de las donaciones, el dinero de la Iglesia me lo jugaba en los casinos, lo que era totalmente falso. Nadie dudó nunca de mi honestidad, nadie dudó nunca de mi inocencia”.
“Yo acepto mi error, fue un error, una irresponsabilidad de mi parte, eso lo acepto”.
“Quiero aprovechar esta entrevista para pedirle disculpas a todas las personas. Entiendan que los sacerdotes somos seres humanos, no somos marcianos, no somos de Júpiter, no somos de Venus, somos de la Tierra y tenemos los mismos errores, obviamente nosotros tenemos más obligaciones de respetar las leyes no sólo las leyes de Dios, las leyes humanas también. Yo pido disculpas, fue un error, una irresponsabilidad mía”.