Las aguas agitadas alrededor de Gaza han obligado a Estados Unidos a sopesar la posibilidad de dejar de lado sus esfuerzos por instalar nuevamente el muelle que ha sido utilizado para la distribución de ayuda humanitaria a los palestinos, informaron dos funcionarios federales el jueves.
El plan inicial de principios de semana era el de colocar nuevamente el muelle por unos cuantos días para la entrega de la ayuda restante y después retirarlo nuevamente, pero las aguas agitadas han evitado su reinstalación.
La Casa Blanca y el Departamento de Defensa señalaron que el muelle dejará de operar “pronto”, pero no especificaron cuándo. Otros funcionarios federales señalaron que el Pentágono y el Mando Central de Estados Unidos discutían activamente el retiro prematuro del muelle debido al mal clima y a algunos problemas de mantenimiento que le restan atractivo a la idea de reconectarlo para sólo unos cuantos días.
Los funcionarios, quienes hablaron bajo condición de anonimato a fin de revelar discusiones internas, señalaron que aún no se toma una decisión final, y que si las condiciones climáticas adversas se calman un poco, existe una ligera posibilidad de reutilizarlo por un breve periodo.
Del otro lado de Washington, funcionarios indicaban el final de lo que ha sido una misión marcada por el mal clima y problemas de seguridad, pero el cual también ha facilitado la entrega de más de 8,6 millones de kilogramos (19,4 millones de libras) de asistencia a los hambrientos residentes de Gaza luego de nueve meses de conflicto entre Israel y Hamás.
“Anticipo que pongamos fin a las operaciones del muelle en relativamente poco tiempo”, dijo el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, en el marco de la cumbre de la OTAN en Washington el jueves. “El verdadero problema en este momento no es llevar la ayuda a Gaza, sino moverse eficazmente alrededor de Gaza”.
Fuente: AP