“Para nosotros es positivo que el cardenal nos pudo escuchar. Nosotros queríamos hace un tiempo poder hablar con el cardenal Jaime Ortega para que escuchara nuestras voces por la represión que hay con la disidencia interna y principalmente con las Damas de Blanco. Para nosotros fue positivo porque el cardenal Jaime Ortega nos atendió, pero también fue receptivo”.
“Él nos explica a nosotras que siempre ha estado en frente a los problemas, a la represión que hay con nosotras y que le va a transmitir al gobierno su preocupación. Su agenda ha estado ocupada y por ende él no puede siempre atender a todas las personas que pidan una audiencia o una cita con él. Él estaba sentado con nosotras, pero también en otras ocasiones que hemos pedido nos han atendido obispos que después le transmiten a él las inquietudes nuestras o de cualquier otra persona que llegue, porque realmente él no tiene tiempo para atender a todas las personas, pero de hecho ya estaba sentado junto a nosotras”.
“Nos dijo que él no deja de tocar, no deja de hablar sobre la represión pero que él no ha tenido respuesta alguna. Para nosotras lo más importante es que él pueda transmitírselo a Raúl Castro. Esto depende del cardenal Jaime Ortega y depende de Raúl Castro, de que pueda escuchar y pueda dar respuesta positiva, que es la que pensamos, la que queremos que sea, porque estamos llenas de fe y de esperanza, eso no va a morir nunca con nosotras, pero eso depende del gobierno cubano de que pueda dar una respuesta positiva y de que pueda escuchar al cardenal Jaime Ortega”.
“Realmente el objetivo nuestro era llegar allí para que el cardenal conociera de la situación actual represiva contra la oposición interna y principalmente contra las Damas de Blanco para que supiera sobre los presos políticos, pero también para recordarle de la carta que habíamos dejado con fecha 25 de mayo para que intercediera ante Su Santidad Benedicto 16 para una audiencia en el Vaticano con una representación de las Damas de Blanco”.
“Todo depende ahora de la voluntad del cardenal y que Raúl Castro pueda o no oír, o quiera o no oír y dar una respuesta positiva para lo que estamos pidiendo que no creo que sea nada en especial lo que nosotros estamos pidiendo, que respeten nuestros derechos y que cese o por lo menos disminuya la violencia, la represión contra las Damas de Blanco”.
