“Esa intención enfermiza de adquirir armas, en países enemigos de occidente básicamente y de corrientes marxistas, socialistas, comunistas que escasamente quedan en el mundo, la Unión Soviética, Corea del Norte y Cuba, aparte de Irán. El problema es el siguiente, el gobierno venezolano es un proyecto político que no solamente es de Hugo Chávez, obedece a intereses geopolíticos externos a Venezuela en el continente y externos hacia la parte de Europa Occidental, Asia, etc., etc.”
“Para imponer su modelo político el gobierno necesita una capacidad y un poder militar, igual que Cuba creció exponencialmente en los años 60, 70 y era un enemigo militar en el área del Caribe, inclusive para Venezuela, con amenazas contundentes sobre las fuerzas armadas y sobre el pueblo venezolano en aquel entonces. Todavía lo es, pero ahora desde el poder”.
“Para ello tiene en América Latina dos o tres países que no comparten su ideología socialista, que es Colombia, Chile y ahora Perú. Perú es una onda diferente al resto del subcontinente”.
“Si yo me estoy equipando de armas es que en algún momento voy a tener una confrontación bélica y esa confrontación bélica no va a ser con los Estados Unidos, porque no hay siquiera la remota capacidad, ni industrial ni militar, ni de capacidad tecnológica para poder enfrentar un conflicto con este tipo de potencia militar. Entonces hay que reducir el análisis geopolítico a cuál es el interés que tiene Venezuela en comprar armas y sobre qué objetivo militar se está proyectando”.
“En mi caso como analista militar y como militar que fui, solamente tiene dos objetivos, Colombia y las islas del Caribe: Aruba, Curazao, Bonaire y Trinidad y Tobago y Grenada, pero esos países no son importantes geopolíticamente para Venezuela, yo me quedaría con Colombia como objetivo a largo plazo, a muy largo plazo”.
“Por otra parte al gobierno venezolano le interesa cerrar compromisos militares y políticos con Rusia, con Irán, con Siria, con Norcorea, con Cuba, con Bolivia, con Ecuador también con Brasil. Entonces estamos viendo la construcción de una capacidad militar apoyada por fuerzas o potencias externas y con países del continente. Es lo lamentable que está ocurriendo”
