“Hay una complicidad muy vieja y muy fuerte y económicamente muy rentable entre algunos militares venezolanos, o los militares venezolanos y la guerrilla, la narco guerrilla colombiana. Es posible que esto ponga en crisis las relaciones entre los dos países. Santos por su temperamento, por su estilo, tratará de minimizar el problema, pero dentro de Colombia debe haber una especie de indignación general por la muerte de estos 12 soldados”.
“Uribe lo que siente es que su estrategia, de esa democracia enérgica que él quería, con controles y lo logró, logró devolverle a los colombianos la posibilidad de viajar por su país, de conectar por carretera las ciudades que estaban prácticamente aisladas, reducir drásticamente el crimen. Logró una cantidad de hazañas políticas tremendas, eso en medio de un crecimiento económico notable”.
“Tiene mucha fuerza moral Uribe para poder reclamarle a Santos que lo que está haciendo no es lo correcto. Santos fue Ministro de Defensa en la segunda etapa de Uribe, nunca fue un uribista, siempre tuvo su proyecto político propio, incluso lo escribió en su momento. Quizá fue un error de Uribe llamar a Santos a formar parte de su gobierno. Creo que no se ha portado bien con Uribe, tuvo que haber buscado una complicidad y una alianza y ponerse de acuerdo con Uribe porque finalmente ese partido que lo controla Santos, no lo controla Uribe, era la fuente de estabilidad política más importante en el país y por el camino que va se puede desintegrar”.