En esta foto del 7 de junio de 2018, el presidente Donald Trump está reunido con el primer ministro japonés Shinzo Abe en la Casa Blanca, Washington, la víspera de la reunión del G7 en Canadá. (AP Foto/Susan Walsh)
Por CATHERINE LUCEY, ROB GILLIES y ZEKE MILLER, Associated Press
LA MALBAIE, Canadá (AP) — El presidente Donald Trump generó mayor dramatismo el viernes en una reunión ya tensa del Grupo de los Siete países industrializados al reclamar el retorno de Rusia, expulsada por su anexión de Crimea.
Trump hizo la declaración en la Casa Blanca después de una gran escalada retórica contra los aliados de Estados Unidos en torno a las prácticas comerciales.
“¿Por qué nos reunimos sin que Rusia esté en la reunión?”, se preguntó Trump. “Deberían permitir que regrese Rusia porque deberíamos tener a Rusia en la mesa de negociaciones”.
Consolidando su papel de solista en el escenario mundial, Trump declaró previamente su avidez por “enderezar acuerdos comerciales injustos” en la reunión anual del Grupo de los Siete países industrializados.
Rusia fue expulsada del grupo en 2014 como sanción por la anexión de Crimea y el apoyo del presidente Vladimir Putin a los separatistas prorrusos en Ucrania. En Estados Unidos, el fiscal especial Robert Mueller investiga si la campaña de Trump coludió con Rusia para tratar de inclinar la elección presidencial de 2016 a su favor.
Trump arribará el viernes a la reunión anual, que este año se realiza en un resort en Quebec, pero se retirará el sábado por la mañana antes del final para dirigirse a Singapur para su cumbre con el líder norcoreano Kim Jong Un. La Casa Blanca anunció sus planes de viaje después que el presidente francés Emmanuel Macron y el premier canadiense Justin Trudeau indicaron que utilizarán el foro para un pronunciamiento contra los aranceles.
El presidente dio señales de intransigencia el viernes al tuitear: “No veo la hora de enderezar Acuerdos Comerciales injustos con los países del G7. Si no sucede, ¡mejor para nosotros!”
Trump atacó los aranceles aplicados por Canadá a los productos lácteos estadounidenses en un nuevo tuit antes del inicio de la cumbre.
En una conferencia de prensa el jueves, Macron enfatizó que “una guerra comercial no perdonará a nadie. Afectará en primer lugar a los trabajadores estadounidenses”. Trudeau dijo que “defenderemos nuestras industrias y nuestros trabajadores”.
“Si logro hacerle comprender al presidente que lo que está haciendo es contraproducente para sus propios objetivos, tal vez podamos avanzar de manera más inteligente”, añadió.
Con la certeza de que tendrá una fría recepción, Trump ha deplorado ante sus íntimos el hecho de tener que asistir al G7 cuando faltan pocos días para su reunión con Kim. El jueves por la noche la Casa Blanca anunció que Trump se iría el sábado por la mañana del G7 para viajar a Singapur, a pesar de que la reunión continuaba hasta más tarde.
Esta es la segunda cumbre de Trump en el G7, que se reúne anualmente bajo una presidencia rotativa. Los miembros son Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Italia y Japón.
