El gobernador Rick Scott y la tribu seminola están apostando a que la Legislatura de la Florida aprobará un pacto entre el Estado y la tribu, y lo están haciendo en grande: un hotel de $1,800 millones con forma de guitarra.
El lunes la tribu expuso los detalles del proyecto en su sede de Hollywood a Scott, quien fue recibido por vítores de cientos de empleados del Hard Rock. El plan de expansión se anunció en la primavera pasada, cuando la tribu comenzó las negociaciones con el gobernador, y continúa siendo promocionado como una recompensa económica para dar a la tribu un monopolio estatal para ciertos juegos de casino.
En el centro de la propuesta está el proyecto del nuevo hotel de 36 plantas y 800 habitaciones, como pieza central de un plan de expansión de la cadena por valor de 1,800 millones de dólares.
La expansión también contempla cinco nuevos restaurantes, incluyendo un nuevo Hard Rock Cafe. Si se completa, como se promueve, la tribu estima que el proyecto crearía 19,452 puestos de trabajo, incluidos 4,867 empleos de tiempo completo y otros 14,585 en la construcción.
“La construcción de un edificio que sea icónico en el Seminole Hard Rock Hotel & Casino de Hollywood, en el sur de Florida, obedece a la voluntad de la tribu de afianzar al estado como un importante destino internacional para los amantes de los juegos de azar”, dijo el gerente de Seminole Gaming, James Allen.
“Hemos creado algo que me parece es un destino turístico internacional y un resort integrado que tiene que ver no sólo con los juegos de azar”, dijo Allen. “Este proyecto competiría no sólo aquí en la Florida, sino también con el Atlantis Paradise Island Resort en las Bahamas y con cualquier otra cosa similar en el mundo”.
Sin embargo, el proyecto depende de un acuerdo entre la Florida y los seminolas, que aunque ya fue aprobado por Scott, encuentra oposición en la Legislatura estatal, la cual debe ratificar cualquier convenio. Ni la Cámara ni el Senado han esbozado una legislación para aprobar el acuerdo, todo ello en medio de una fuerte oposición por parte de las actuales compañías operadoras de juegos.
El convenio por 20 años le daría a la tribu derechos exclusivos para operar las mesas de blackjack (veintiuna), dados y ruleta en sus siete casinos a cambio de pagos en los que se comparten los ingresos, lo que le garantizaría al estado $3,000 millones en un período de siete años, a partir del 2017.
Scott dijo que se trataba del “mayor convenio que jamás se ha firmado” y le agradeció a los jefes de la tribu su ayuda para poder concluir satisfactoriamente el negocio.
Scott agregó que el convenio podría ayudar a preservar más de 3,500 empleos que corren el riesgo de desaparecer si por alguna razón no se concreta el acuerdo. Ello se debe a que una cláusula de cinco años para juegos de cartas como blackjack y baccarat, que formaba parte del anterior acuerdo, expiró en el verano.
Varios empleados que corren el riesgo de perder sus trabajos si fracasan las negociaciones hablaron en el evento de Hollywood, entre ellos Patricia Rodríguez, gerente de los juegos de mesa.
El año pasado, la tribu propuso una expansión parecida de $1,600 millones en Tampa y Hollywood que crearía 4,000 empleos permanentes, antes de que expire su acuerdo de juegos.
La propuesta fue presentada en marzo en la sesión legislativa, dijo Allen, pero la expansión nunca se discutió en ninguna audiencia del comité.
En la actualidad, dijo, la tribu se siente “optimista” de que se llegará a un acuerdo con el estado.
De ser así, el hotel con la guitarra metálica de Hard Rock engalanaría la silueta del sur de la Florida para el verano del 2018.
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