Dos bombarderos supersónicos de la Fuerza Aérea de Estados Unidos volaron este martes sobre Corea del Sur como señal de advertencia al régimen norcoreano de Kim Jong-un tras su reciente prueba nuclear.
Flanqueados por aviones de combate F-15K surcoreanos y F-16 estadounidenses, los dos bombarderos estratégicos B-1B Lancer realizaron un vuelo a baja altura cerca de la base de Osan, unos 50 kilómetros al sur de Seúl, informaron las fuerzas de Estados Unidos en Corea del Sur (USFK) en un comunicado.
Con el despliegue de los dos bombarderos, traídos expresamente desde la base estadounidense de Guam en el Pacífico, Seúl y Washington quieren enviar a Pyongyang el mensaje de que «están preparados para responder en todo momento a las amenazas contra la estabilidad y la seguridad» en la región, según el comunicado.
La demostración de fuerza de este martes es «sólo un ejemplo de las diversas capacidades militares que forman parte de los recursos de esta sólida alianza para proporcionar y reforzar una amplia disuasión», afirmó el general Vincent Brooks, comandante de las USFK, citado en la nota. El general añadió que la prueba nuclear llevada a cabo el viernes por Corea del Norte «supone una peligrosa escalada (armamentística) y plantea una amenaza inaceptable», y remarcó el «compromiso inquebrantable de EEUU de defender a sus aliados en la región».
El vuelo de bombarderos estadounidenses sobre Corea del Sur, algo inusual al margen de las maniobras militares conjuntas que los aliados realizan periódicamente, podría generar nuevas amenazas de Corea del Norte en un ambiente marcado por la fuerte tensión desde la prueba nuclear del pasado viernes. Esta prueba, la quinta y la más potente hasta el momento, generó una gran preocupación debido a que, según Pyongyang, sirvió para poner a prueba «con éxito» la miniaturización de cabezas nucleares equipables sobre los misiles de su nutrido arsenal.
El ensayo atómico generó el rechazo de la comunidad internacional, y posiblemente el Consejo de Seguridad la ONU imponga nuevas sanciones al régimen de Kim Jong-un, que ya sufre una fuerte restricción en sus actividades comerciales por la anterior resolución aprobada en marzo.
Estados Unidos mantiene desde la Guerra de Corea (1950-53) una alianza militar con Corea del Sur por la cual se compromete a defender a su aliado en un hipotético conflicto con Corea del Norte.
Fuente: Infobae