WASHINGTON — La cantidad de estadounidenses que solicitaron prestaciones del gobierno por desempleo aumentó nuevamente la semana pasada a 885.000, pero disminuyó el número de desempleados en Estados Unidos de 5,8 millones a 5,5 millones.
El número total de personas que reciben las tradicionales prestaciones del estado por desempleo se redujo de 5,8 millones a 5,5 millones, una cifra muy por debajo de su pico de casi 23 millones en mayo.
Las regulaciones impuestas nuevamente en varios estados gobernados por demócratas incidió en el ligero incremento de solicitudes, sin embargo, la economía continúa su curso con sólida tendencia al alza.
La construcción de viviendas nuevas en Estados Unidos registró un incremento del 1,2% en noviembre sobre octubre, un alza sorpresiva que confirma la buena salud del sector inmobiliario y la recuperación económica, según datos del Departamento de Comercio divulgados este jueves.
En noviembre, en proyección anual, 1,547 millones de casas e inmuebles privados comenzaron a construirse en Estados Unidos. Comparado con noviembre del 2019, el incremento es del 12,8%.
El Departamento de Trabajo precisó el jueves que el número de solicitudes por desempleo aumentó, frente a las 862.000 de la semana anterior. La cifra mostró que nueve meses después de que la pandemia paralizara la economía, muchos empleadores recortan puestos de trabajo a medida que se imponen más restricciones a los negocios y se obliga a mucha gente a quedarse en casa.
El número de solicitudes de ayuda fue superior a las 800.000 que esperaban los economistas.
Antes de que estallara la crisis de coronavirus en marzo, las solicitudes semanales de desempleo solían ascender a unas 225.000. El ritmo actual, mucho más alto, refleja un mercado laboral bajo tensión y una menor seguridad laboral para muchos.
El número total de personas que reciben las tradicionales prestaciones del estado por desempleo se redujo de 5,8 millones a 5,5 millones, una cifra muy por debajo de su pico de casi 23 millones en mayo.
La cifra anterior significa que muchos estadounidenses están encontrando trabajo y que ya no reciben la ayuda, pero también indica que muchos de los desempleados agotaron sus derechos a prestaciones estatales, que normalmente expiran después de seis meses.
FUENTE: Con información de AP