“Yo creo que los planteamientos de Correa en la reunión de la OEA en Bolivia, obedecen a su desesperación por lavar su deteriorada imagen tanto a nivel nacional como internacional. Está obviamente Correa preocupado por su futuro político, por la posibilidad, yo creo que más temprano que tarde, se acabe, se termine su proyecto totalitario”.
“Tanto ocurre en Ecuador como en otros países, Venezuela es uno de ellos y el resto de países, el caso de Bolivia que tienen una misma posición y entonces tenga que dejar el poder y tenga que rendir cuentas a la justicia tanto a nivel nacional como internacional por los graves actos de corrupción de su gobierno, todas las acusaciones que existen de los vínculos con el narcotráfico. Las denuncias, los escándalos que a diario ocurren en mi país, la violación de los derechos humanos, su abuso del poder”.
“Él sabe además que los únicos países que le podrían brindar ayuda en ese momento, son aquellos regímenes totalitarios con que han hecho alianza, como el caso de Cuba, Irán, Bolivia”.
“Yo pienso que Correa está aprovechando de una situación, que es por todos conocida, que de las falencias que efectivamente existen en los organismos internacionales como es el caso de la OEA, como es el caso de las Naciones Unidas y que han sido planteadas no solo por él sino por otros líderes democráticos también sobre temas que hay que ir corrigiendo, pero son temas que no tienen que ser impuestos, sino consensuados”.
“En el caso de él es que quiere vincular estos temas a graves acusaciones de violaciones a los derechos humanos hechas por la CIDH, es decir para entender sus declaraciones hay que verlas a la luz de su situación política. Él necesita lavar su imagen que está tremendamente alicaída, en el Ecuador hay elecciones pronto y él sabe que en el Ecuador con una aprobación de menos del 30%, es muy posible que él a pesar de toda la maquinaria electoral propagandística que tiene y de la posibilidad de fraude reciba una contundente derrota que le obligue a dejar el poder”.
“Si hay algo que funciona bien en la OEA es la CIDH denunciando la violación de los derechos humanos en todos los estados totalitarios, en las dictaduras y eso debe mantenerse así”.
“Correa es un oportunista, entonces se aprovecha de situaciones conocidas por todos para poner en un mismo saco un montón de hechos a los que quiere culpar como la razón de sus problemas y tergiversar la verdad sobre los actos de corrupción y violación de derechos humanos en el Ecuador”.