“Son alrededor de 40 trabajadores, son cifras contradictorias a veces, 38, 42, en fin son alrededor de 40 trabajadores de una empresa que opera el ducto de gas que va de la selva peruana hacia la costa. Ellos han sido secuestrados por un grupo terrorista de Sendero Luminoso, que es el último grupo que queda ya en el Perú. Están en esta zona que es agreste, selvática desde hace 25 años y han tenido la oportunidad de secuestrar a estas personas y exigir una cantidad de dinero ala empresa. No se sabe si hay alguna negociación entre la empresa y los secuestradores”.
“Han un antecedente, en el año 2003 cuando se estaba construyendo precisamente este ducto de gas, también fueron secuestrados 70 trabajadores y aparentemente la empresa pagó un rescate, alrededor de cien mil dólares, aunque la empresa lo negó, pero parece que eso fue la solución del asunto”.
“Yo creo que es lógico que el gobierno diga que no va a negociar con terroristas, sino eso daría y pésimo ejemplo y llevaría a que se puedan repetir estas acciones. Pero, que la empresa lo haga sin que el gobierno se entere es algo que puede ocurrir y posiblemente esté sucediendo en este momento”.
“A la empresa lo que le interesa es que su trabajadores queden en libertad sanos y salvos, entonces esa sería una solución”.
“Sendero Luminoso es un grupo extremista que ha estado contra todos los gobiernos, de izquierda y de derecha y en su trayectoria ha asesinado a muchos dirigentes de izquierda, sindicalistas. Había dos grupos en la zona de coca y narcotráfico. Uno de ellos acaba de ser liquidado definitivamente y queda este grupo que está también en una zona de narcotráfico y de producción de coca. Son alrededor de 200, 220, el asunto es que la zona es muy agreste, están armados y conocen bien el terreno, esa es su gran ventaja y aprovechan las oportunidades”.
“La única oportunidad que tenían en este caso era secuestrar este grupo porque en esta zona no hay empresas, no hay grandes hacendados, no hay gente de dinero. Esa gente vive de los cupos que le cobran a los narcotraficantes, de la seguridad que le brindan a los traficantes de la zona y también a la producción de pasta básica y de cocaína”.