El senador de Florida Miguel Díaz de la Portilla pidió al gobernador del estado, Rick Scott, una nueva votación, “tras audiencias públicas”, sobre la reciente normativa aprobada que permite el aumento de sustancias químicas que son consideradas “cancerígenas” en el agua potable.
El senador estatal republicano alertó además en una carta enviada a los residentes en el condado de Miami-Dade sobre los peligros “cancerígenos” que entraña el nuevo plan sobre calidad del agua aprobado a finales de julio pasado por la Comisión Reguladora de Medioambiente (ERC) de Florida.
La ERC “pasó esta medida apresurando la votación y excluyendo a dos miembros esenciales que, con toda seguridad, habrían impedido que la medida pasara”, resaltó el legislador en la carta en la que acusó a este organismo de “esencialmente silenciar” al público de los condado de Miami-Dade, Broward y Monroe.
“No puedo entender cómo se permite el incremento de uno solo de los múltiples agentes conocidos como causantes de cáncer en nuestras aguas”, reprobó Díaz de la Portilla.
No dudó en afirmar que la ERC ha aprobado una nueva normativa sobre estándares de calidad de agua que entraña una “amenaza para las aguas potables de Florida y la seguridad de nuestras comunidades”.
Permite esta normativa, censuró, el “aumento de cancerígenos” en “casi el doble de lo recomendado” por las autoridades estadounidenses de protección medioambiental (EPA).
Y advirtió: “De entrar en vigor este nuevo estándar” las “consecuencias medioambientales serán desastrosas”.
Este mes la tribu de los indios seminolas y la alcaldía de Miami presentaron una reclamación contra esta nueva normativa sobre los estándares de calidad del agua que permite el aumento de hasta un centenar de sustancias químicas tóxicas.
Entre otros subproductos tóxicos se encuentra el benzeno, un cancerígeno derivado del petróleo muy usado en la fracturación hidráulica (“fracking”) para detectar petróleo o gas natural.
De hecho, un nuevo estudio publicado la semana pasada por la Universidad de Misuri sugiere que los químicos usados en la práctica del “fracking” aumentan los riesgos de “sufrir abortos, infertilidad masculina, cáncer de próstata y defectos de nacimientos por una interrupción hormonal”, según recogió la publicación Florida Today.
En la carta remitida al gobernador Scott, el senador le explica el peligro de esta medida aprobada para todos los floridanos y le solicita que “cubra las dos vacantes de la ERC” y se proceda a una segunda votación, tras celebrar una serie de “audiencias públicas” en el estado.