El senador por Vermont y aspirante a la nominación del partido Demócrata para las elecciones presidenciales de EE.UU. Bernie Sanders pidió al Gobierno que dirige Barack Obama que detenga las deportaciones y las separaciones de niños y familias de inmigrantes indocumentados.
«Estados Unidos siempre ha sido un símbolo de libertad para aquellos que huyen de la violencia y la persecución. Las redadas que separan a nuestras familias no representan nuestra esencia», indicó Sanders en un comunicado.
El veterano senador, autoproclamado socialista democrático, aseguró que la deportación «puede llegar a ser una sentencia de muerte para menores de edad, padres de familia y solicitantes de asilo que son detenidos».
«Pedir que niños de a penas tres años de edad se representen a sí mismos legalmente en audiencias migratorias es un vergonzoso extravío de justicia y no debemos permitir que continúe. Las familias merecen un trato justo y nuestra compasión, no un proceso diseñado para exponerlos al peligro», apuntó Sanders.
El senador tildó de «cruel» e «inhumano» el proceso de encarcelamiento y deportación de refugiados centroamericanos que, a su juicio, «solo buscan escapar de la violencia» y pidió a Obama que decrete una moratoria sobre esas redadas «lo antes posible».
Sanders puso como ejemplo la posible deportación de Wildin Acosta, un joven adolescente que escapó de Honduras después de que un pandillero «amenazara con matarlo» y la deportación pendiente de Ladislao Padilla Ochoa, «un padre de familia que ha vivido en Tennessee durante casi 20 años».
Los ciudadanos de Wisconsin (centro-norte de EE.UU.) acudirán a las urnas este martes para decidir quién quieren que sea el candidato demócrata a la Casa Blanca, si Sanders o su rival, la exsecretaria de Estado Hillary Clinton.
Fuente: EFE