“El proceso afortunadamente ha sido muy rápido, yo no estaba esperando ninguna carta del proceso hasta en tres meses, pero a la semana ya había recibido una carta de que ya mi documentación estaba en proceso. Está muy rápido ese proceso y eso nos alegra mucho”.
“Yo vine a los Estados Unidos a los 9 años y yo no supe que estaba indocumentado hasta los 16, al final de mi 11° grado en high school. Cuando estaba yendo a la escuela pública nunca tuve problemas y nunca me pregunté si era documentado o no, pero una vez que empecé a aplicar a las universidades, en las aplicaciones preguntan por status migratorio, prueba de residencia, y yo no tenía ninguna prueba de residencia”.
“Entonces una universidad muy prestigiosa de la Florida, la universidad de la Florida, yo le conté a una de esas personas que iban a nuestro high school y nos decían: -Tienen que aplicar- yo le dije un día a ella: -Mira yo no tengo documentación y no puedo aportar la prueba de residencia, qué puedo hacer?, entonces ella me dice que ninguna universidad del estado de la Florida me va a aceptar. Yo era un muchacho que tenía muchas expectativas y me derrumbó todo el mundo”.
“Me encontré una organización que se llama SWER, Students Working for Equal Rights, que se traduce a Estudiantes trabajando para la igualdad de los derechos y ellos me conectaron a Miami Dade y apliqué a Miami Dade Honors College, el Colegio de Honores y fui aceptado y después pagué como unos 10.000 dólares para pagar mi educación y con eso terminé mis dos primeros años de Miami Dade y después de eso apliqué para más becas y estoy estudiando en la universidad St. Thomas”.
“A aquellos que no nos quieren, que creen que nosotros somos unos parásitos, les quisiera decir que se sienten y que hablen cono nosotros, que nos escuchen y ellos verán que no somos lo que dicen las noticias o que dicen los programas que ellos miran de televisión o de radio. Nosotros somos personas como ellos, como los hijos que ellos tienen, los amigos de sus hijos, somos iguales que todos los muchachos. Lo único que no tenemos es un papel con nueve números de seguro social. Nosotros somos y sentimos igual que ellos, y lo que está pasando ahora que nos están dejando quedar por dos años más en los Estados Unidos, les vamos a comprobar de que no somos ningún parásitos y que vamos a aportar al país y no vamos a tener ningún problema”.
