Rusia suspendió el miércoles su segundo intento para probar un nuevo cohete de carga pesada desde su complejo espacial del extremo oriental del país.
El despegue del cohete Angará-A5 desde el puerto espacial de Vostochny se canceló unos dos minutos antes de la hora prevista de despegue, las 9 de la mañana. La agencia noticiosa estatal RIA-Novosti dijo que la causa fue un fallo en el sistema de presurización del tanque oxidante del bloque central del cohete.
La agencia espacial rusa, Roscosmos, dijo que cualquier nuevo intento de lanzamiento se demorará al menos un día.
El primer intento del martes fracasó cuando el sistema automático de seguridad registró un fallo en el sistema de presurización del tanque oxidante, dijo el director de la agencia, Yuri Borisov.
El lanzamiento iba a ser el cuarto del Angará-A5, una versión de carga pesada de la nueva familia de cohetes Angará, desarrollada para reemplazar a los Proton, de diseño soviético.
Las tres pruebas anteriores se llevaron a cabo en el centro de lanzamiento de Plesetsk, en el noroeste de Rusia.
Tras la desintegración de la Unión Soviética en 1991, Rusia arrendó el cosmódromo de Baikonur a Kazajistán y siguió utilizándolo para la mayoría de sus lanzamientos. El acuerdo permite a Moscú seguir rentando Baikonur por 115 millones de dólares al año hasta 2050.
Aunque la agencia espacial rusa, Roscosmos, ha seguido confiando en Baikonur, las autoridades han desarrollado Vostochny como la instalación elegida para los lanzamientos de Angará. La construcción del nuevo puerto espacial se ha prolongado más de lo previsto y, hasta ahora, su uso ha sido limitado.
Fuente: AP