El senador Marco Rubio está tratando de aferrarse a sus delegados con la esperanza de detener el ritmo acelerado del candidato presidencial, Donald Trump.
Antes de suspender su campaña, Rubio acumulaba 171 delegados.
En cartas enviadas a funcionarios republicanos en estados donde ganó los delegados, Rubio dijo que quiere mantenerlos a pesar de que ya no es un candidato activo.
Los representantes de la red de Rubio señalaron que el ex candidato quiere conservar sus delegados con el fin de mantener sus opciones abiertas de cara a los próximos meses. Las campañas se están preparando para la posibilidad de una convención nacional en julio que podría presentar una lucha intensa por cada delegado disponible.
Los representantes de Rubio hablaron bajo la condición de anonimato porque no estaban autorizados a declarar públicamente sobre las intenciones del representando de Florida en el Senado.
Rubio, un crítico agresivo de Trump, podría desempeñar un papel importante en la convención nacional debería intentar mantener mantener su influencia sobre un número significativo de delegados.
Hay que recordar que Rubio anunció su renuncia de la carrera hacia la Casa Blanca, luego de su derrota el pasado supermartes, en su propia casa y contra su némesis, el pintoresco y polémico Donald Trump.
Rubio podría sugerirles a los delegados apoyar a un candidato en específico, sin embargo ellos no estarían obligados a obedecer.
Si Rubio decidiera volver a la contienda presidencial, podría recuperarlos. El senador por la Florida habría ganado 163 delegados para la Convención Nacional Republicana.
Las reglas del Partido Republicano exigen que los delegados voten por el candidato que los obtuvo en la primera ronda de votación de la convención.
Pero la mayoría de los partidos estatales liberan a esos delegados si su candidato ya no está en campaña.
Fuente: Miamidiario.com
