La modelo puertorriqueña Génesis Dávila, destituida como Miss Florida a los pocos días de ser coronada, anunció hoy una demanda legal contra el productor del concurso en la que pedirá una compensación por daños de 15 millones de dólares.
Acompañada de su abogado, Richard Wolfe, Dávila dijo ser «inocente» de las «falsas acusaciones» formuladas en su contra por Grant Gravitt, productor ejecutivo del concurso Miss Florida.
El 22 de junio Gravitt anunció que, debido a que Dávila había quebrantado las normas del concurso, Linette de los Santos, nacida en República Dominicana y primera finalista, pasaba a ser la propietaria de la corona que da derecho a participar en Miss USA.
Dávila, nacida en Arroyo (Puerto Rico) hace 23 años, fue destituida porque, según Gravitt, fue asistida por peluqueros y maquilladores profesionales en su habitación del hotel el día del concurso, lo que no estaba permitido.
Según dijo hoy la destronada, ha tenido muchos momentos difíciles en su vida, pero «ninguno como éste» y ahora solo confía en que su abogado y el sistema judicial de EE.UU. podrán «probar su inocencia» y «salvar su reputación».