La policía canadiense el domingo comenzó a despejar y detener a los manifestantes cerca de un importante puente en la frontera estadounidense, que se oponen a los mandatos de vacunas y otras restricciones impuestas por el coronavirus.
Imágenes de televisión muestran a policías arrestando a los pocos manifestantes que quedaban poco después del amanecer en el Puente Ambassador, que vincula a Detroit con Windsor, Ontario y es el punto de cruce más transitado entre los dos países.
La policía de Windsor informó que varias personas están siendo arrestadas y varios vehículos están siendo remolcados.
Solo dos camiones y menos de una veintena de manifestantes quedaban bloqueando el acceso al puente antes de que la policía iniciara sus acciones. Poco después, había en el lugar barreras policiales y no quedaba claro cuándo el puente quedaría abierto otra vez.
El sábado, la policía convenció a manifestantes a sacar sus camiones y demás vehículos que bloqueaban al puente, por el que pasa el 25% del comercio entre los dos países.
En la capital, Ottawa, las manifestantes han ascendido a 4.000 personas, según la policía. En días recientes, los descontentos han estado acampando, sonando música a todo volumen y merodeando por el centro de la capital.
Los protestas en el puente, en Ottawa y en otras partes del país han repercutido en el exterior. Caravanas similares han surgido en Francia, Nueva Zelanda y Holanda. Las autoridades estadounidenses han advertido que protestas similares podrían ocurrir en el país.
Una ex ministra en el gobierno del primer ministro canadiense Justin Trudeau tomó la acción inusual de denunciar a sus ex colegas en el gobierno por no tomar medidas para poner fin a los desórdenes.
“Increiblemente, esto ocurre no solo en Ottawa que la capital de nuestra nación”, tuiteó la ex ministra, Catherine McKenna. “Y sin embargo nadie — ni la ciudad, ni la provincia ni el gobierno federal — parecen capaces de poner fin a esta ocupación ilegal. Es asombroso … Tienen que organizarse, inmediatamente”.
Trudeau hasta el momento ha rechazado llamados a desplegar a las fuerzas armadas, aunque ha enfatizado que “todas las opciones están sobre la mesa” y ha calificado a los manifestantes de “extremistas” al margen de la sociedad canadiense.
Fuente: AP