“Yo estoy convencido que hubo contactos secretos en Cuba. No es gratuito que una mujer como Piedad Córdoba, reconocida líder en Colombia, que ha afrontado situaciones muy difíciles desde el punto de vista de su vínculo con las FARC, pero que igualmente mantiene una puerta abierta con ellos, se encuentra en Cuba, aparentemente buscando contactos. Su movimiento en Colombia mientras ella estaba en Cuba, lanzaba propuestas para medir el ambiente y la reacción en Colombia, y también está el hombre fuerte para el tema de la paz, del ex presidente Andrés Pastrana que es Gustavo Bell, quien fuera en su momento no solamente delegado del gobierno para el tema de la negociación sino vicepresidente de la república”.
“Ella no tiene ninguna calidad oficial por parte del gobierno del presidente Santos. El presidente Santos ha sido claro y enfático en que no representa los intereses ni la vocería del gobierno colombiano. Para muchos en el país creemos que tiene su movimiento político, que se llama Colombianos y colombianas por la paz, pero muy seguramente ella está representando intereses, además de ese grupo, el interés por sacar adelante la negociación con las FARC, es decir, ella tiene una vinculación estrecha con las FARC. Tenemos que recordar que precisamente por esa relación, yo diría abusivamente carnal, pierde ella la investidura como Senadora de la república y afronta un proceso penal que muy seguramente va a tener consecuencias mucho más delicadas”.
