Una situación que sin duda mueve la fibra de cualquier ser humano. Historias y testimonios de quienes a diario cruzan las fronteras para buscar mejores oportunidades de vida y una nueva esperanza. Ese fue el tema de la conversación “Al final del día” con Julio Bevione este jueves.
Carlos Arturo Albino, periodista de las cadenas RCN y NTN24 compartió cabina con Bevione y contó su experiencia con “Los niños que andan solos ” un trabajo de investigación para la cadena RCN.
“Ellos (los niños) dicen voy a la frontera, voy hacer algo de dinero, y se quedan en la frontera o siguen su camino” … “Mi hermano me dejó aquí en Cúcuta, él se fue a Chile, y unas amigas se prostituían por un dólar y medio para nosotros poder comer” parte de uno de los testimonios que Albino recogió en su experiencia en esa frontera convulsionada, la misma donde los niños “deciden emprender un viaje sin un rumbo fijo”
Por su parte, el director general de Fe y Alegría, Padre Manuel Aristorena, conocido en Venezuela como el Padre Piedra asegura que esta situación es parte de los problemas estructurales de un país que cada día está más deprimido. “Si los niños estuvieran bien en el país, no haríamos una exportación de problemas” acotó el religioso.
Pero para él (el padre) como para el resto del equipo de la fundación Fe y Alegría, la educación tiene mucho que ver en la recuperación de estos niños; para lo que Fe y Alegría hace una labor titánica en más de 20 países, siendo Venezuela donde más presencia tienen con más de 170 instituciones para fomentar educación y ayuda para los niños necesitados.
Noelbis Aguilar, Directora del programa Escuela Fe y Alegría en Venezuela, explicó que son los jóvenes en edad temprana los que están huyendo de Venezuela, lo que debería -según su opinión- convertirse en “una preocupación” para las agencias internacionales “Tenemos que poner nuestra mirada en los adolescentes que son quienes están saliendo” dijo la invitada.
Para el padre Aristorena el problema va más allá de la huida de un niño “Yo creo que el problema hay que ponerlo muchos más en el candelero, y es que en Venezuela se habla de que un millo 400 mil niños abandonan la escuela, pero no se habla del drama de cada uno de esos niños y jóvenes”
La realidad de la frontera entre Venezuela y Colombia supera cualquier situación que se pueda imaginar. No hay registros, no hay autoridad, no hay certeza de nada lo que en un momento alguien vivió en algún punto de la frontera.
LA XENOFOBIA NO TIENE EDAD, NI FRONTERA
El periodista venezolano Carlos Albino relató parte de un nuevo trabajo que está preparando. La xenofobia, un tema que en Colombia ha cobrado fuerza y que cada vez es más común entre los venezolanos migrantes que llegan a este país suramericano, pero que ahora no solo se queda en los adultos, sino también en los más chicos que sufren discriminación “solo por ser venezolanos”
“Cada vez que hacíamos estas entrevistas teníamos que parar esta grabación… porque también llorábamos con los niños” relató el comunicador.
Mientras que para el padre los venezolanos viven un doble sufrimiento “Es el doble sufrimiento. Hay que salir de un país y llegar a un país donde te desprecian”
Sin duda, un tema que acapara la atención de muchos pero que parece no mover a todos. La solución parece estar lejos de llegar en una frontera caliente, en donde el delito, la violencia y la separación de familias se ha convertido en el pan nuestro de cada día.