Las autoridades estadounidenses anunciaron este jueves la detención de 267 pandilleros de la Mara Salvatrucha (MS-13) en El Salvador y Estados Unidos, en una operación policial que buscaba debilitar la estructura internacional de la banda y sus fuentes de financiación.
La operación, bautizada «Raging Bull», se desarrolló en dos fases: la primera resultó en el arresto de 53 pandilleros en El Salvador tras una investigación de 18 meses y la segunda, que se llevó a cabo en EEUU entre el 8 de octubre y el 11 de noviembre, desembocó en la detención de otros 214 pandilleros.
En una rueda de prensa en Washington, el director interino del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), Thomas Homan, anunció los resultados de la operación policial y aseguró que acabar con la Mara Salvatrucha es una de las «mayores prioridades» de su Gobierno.
«No descansaremos hasta que cada miembro, cada aliado, cada líder de MS-13 sea responsable de sus crímenes y sean deportados aquellos que viven ilegalmente en el país», añadió Homan.
De los 214 detenidos en EEUU, 93 fueron arrestados por haber cometido algún crimen, entre los que se incluye asesinato, robo, narcotráfico o asalto, mientras que el resto (121) fueron apresados por haber cometido alguna falta administrativa por haber infringido normas del sistema migratorio.
Además, 16 de los 214 detenidos eran ciudadanos estadounidenses, mientras que 198 eran extranjeros y solo cinco tenían permiso para residir legalmente en Estados Unidos, según detalló el subdirector ejecutivo asociado de la unidad de investigaciones del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), Derek Benner.
Entre los extranjeros detenidos se incluyen 135 salvadoreños, 29 hondureños, 17 mexicanos, 12 guatemaltecos, 4 ecuatorianos y un nacional de Costa Rica, detalló en un comunicado el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
El Gobierno del presidente de EEUU, Donald Trump, ha anunciado una política de «tolerancia cero» con las bandas criminales, como la Mara Salvatrucha, a la que las fuerzas del orden han dicho que perseguirán judicialmente con el fin de bloquear sus fuentes de ingresos y menguar el número de pandilleros en sus filas.
La violencia de la Mara Salvatrucha y su rival, Barrio 18, han convertido a El Salvador en uno de los países más violentos del mundo, con altos índices de asesinatos.
Fuente: Infobae.com
