“Creo que hay un libreto que se ha trasladado desde Venezuela, donde se originó, al Ecuador, a Bolivia y a Nicaragua. Comenzó con esta cantaleta de la Asamblea Constituyente que antes se usaba para reconstituir al estado desde el punto de vista formal cuando se producían quebrantamientos al orden constitucional. Antes los golpes de estado se daban desde las fuerzas militares, ahora resulta que la toma del poder se hace por quienes se hacen elegir y una vez elegidos comienzan a quebrantar todas las normas constitucionales, incluso las constituciones que ellos mismos han dictado”.
“En Ecuador cuando se hizo la Asamblea Constituyente lo primero que Correa hizo fue disolver el Congreso. Tomar el poder legislativo a través de la Asamblea Constituyente y librarse de la fiscalización. Cuando yo dije eso en el año 2007 casi me arrastran por las calles. La gente decía cómo es posible que se opongan al cambio. No es que nos oponemos al cambio nos oponemos a que haya abuso de poder y que se vaya enseñoreando el abuso de poder”.
“Desgraciadamente esto a devenido en una permanente agresión a los derechos ciudadanos, un ultraje a las libertades en todas sus formas, incluso se ha llegado a la utilización de la justicia para perseguir a los medios de comunicación, a los periodistas, para perseguir a quienes en definitiva están librando una batalla en contra de un modelo autoritario que en el caso de Rafael Correo comenzó como un populismo leninista que comenzó a tener ribetes estalinistas cuando utilizaron la violencia para disolver al Congreso, acabar con la función electoral, liquidar a la Corte Constitucional y luego creo que sin duda ya tiene un emparentamiento directo con el fascismo”.
