“Es una investigación con colegas venezolanos, es que el 1° de diciembre pasado en un acto entre los gobiernos de los presidentes Hugo Chávez de Venezuela y Cristina Fernández de Kirchner de Argentina, se anunciaron una serie de acuerdos muy dudosos porque las empresas involucradas en algunos planes de obras públicas en Venezuela, en realidad habían sido constituidas de manera bastante irregular y seleccionados por el gobierno de Argentina como decimos aquí, a dedo, muy discrecionalmente”.
“Hay un acuerdo de los que se anunciaron, de diez mil viviendas en el estado Carabobo en Venezuela para la empresa CONLAT y la verdad es que esa empresa hasta el momento en que se anunció el acuerdo no existía, se constituyó unos días después; el 26 de diciembre aparece publicada el acta societaria correspondiente en el diario oficial de la República Argentina”.
“También se anuncia la construcción de una fábrica de materiales de construcción a favor del grupo TAK, que esa empresa si estaba creada desde 2010. Lo que descubrimos allí es que no son socios argentinos, sus socios son una pintora, argentina sí, pero que vive en Nueva York desde hace por los menos 25 años, desde 1981 y un venezolano que también reside en la ciudad de Nueva York, por lo cual mal se puede hablar de un beneficio para una empresa argentina”.
“No abunda la transparencia lamentablemente en cómo se gestan este tipo de acuerdos. Recordemos que desde 2004 quien maneja del lado argentino la relación comercial con Venezuela es el ministro Julio de Vido, ministro de planificación muy cercano al matrimonio Kirchner, y lo que lamentablemente en el caso de la empresa CONLAT remite a una serie de consultoras que también tiene socios santacruceños. Son tres agrimensores que en 2005 desembarcaron en la ciudad de Buenos Aires, conformaron una consultora y además según nuestra investigación periodística ha sido beneficiada no sólo por dineros por acuerdos con Venezuela sino también por grandes concesiones de obras públicas en Argentina”.
“No hay transparencia y claramente en los acuerdos con Venezuela hay mucha discrecionalidad en la elección de los empresarios. Lo que si hay que decir que en este caso de las dos empresas aparentemente no se concretaron los desembolsos, o sea, la investigación periodística permitió advertir que las empresas estaban mal constituidas y ahora esperemos que el gobierno de Venezuela y el gobierno de Argentina revisen la situación”.