“Los jóvenes Vázquez, Osorio y Oropeza salieron de un puerto del sector pacífico de la república de Panamá con miras a llevar a cabo una actividad de pesca para su subsistencia, es pesca artesanal. Salieron en una embarcación de 26 pies con motor fuera de borda de 40 HP. Estaban programados para permanecer solo 16 horas en el agua, lastimosamente cuando ya estaban avistando tierra firme el motor se apagó, pero aunque tiraron ancla no fue suficiente y el barco queda a la deriva, ellos realizaron ingentes esfuerzos para arrancar el motor pero de todas maneras fueron llevados a aguas en alta mar”.
“Aproximadamente 10 o 12 días después de estar a la deriva, se dio el encuentro con el crucero Star Princess y a pesar de los llamados y las alertas comunicadas por los pasajeros que contaban con todos estos equipos de avistamiento de aves, marcaron inclusive el posicionamiento de su encuentro con el GPS o sistema de posicionamiento global que tenían consigo y es así como se conoce el punto de encuentro y coordenadas exactas en que se da el encuentro y posterior abandono de estos náufragos que estaban evidentemente a la deriva en zozobra porque el solo hecho de que una embarcación de 26 pies se encuentra a 160 millas náuticas de la costa, resulta evidente que están en zozobra y más aún con los llamados de atención que se reflejan en las fotografías que han circulado a nivel mundial en el internet que fueron tomadas por estos pasajeros que no son más que unos ángeles que tuvieron la sensibilidad de querer salvar la vida de estos tres jóvenes, pero que lastimosamente solo sobrevivió uno Adrián Vázquez, que es en cuyo nombre se ha presentado la demanda en Florida a través de la firma Dickman, Epelbaum & Dickman”.