
La ola de frío polar que golpea gran parte de Estados Unidos ha dejado al menos 23 fallecidos en distintos incidentes y más de cuatro millones de hogares sin suministro eléctrico, mientras ha comenzado a obstaculizar la vacunación contra la COVID-19.
El temporal ‘Uri’, que tiene a 105 millones de personas en alerta en distintos puntos del centro, sur y este del país, ha dejado ya una veintena de muertos en distintos incidentes como caídas, incendios en viviendas sin electricidad, intoxicaciones con monóxido de carbono en intentos de generar calor, atropellos o accidentes de coche, informa The New York Times.
Otras causas incluyeron accidentes automovilísticos e intoxicación por monóxido de carbono. El clima también amenazó con afectar el esfuerzo nacional de vacunación contra COVID-19. La administración del presidente Joe Biden dijo que era probable que se produjeran retrasos en los envíos y entregas de vacunas.

El Servicio Meteorológico Nacional quedó “muy sorprendido de la rapidez con la que se intensificó esta tormenta y en el momento de la noche cuando la mayoría de la gente está en casa y en la cama, crea una situación muy peligrosa”, dijo el director de Servicios de Emergencia, Ed Conrow.
En Chicago, un pie y medio (46 centímetros) adicional de nieve obligó a las escuelas públicas a cancelar las clases presenciales del martes. Horas antes, a lo largo del normalmente templado Golfo de México, el esquiador de fondo Sam Fagg se encontró con polvo fresco de nieve en la playa de Galveston, Texas.
Los peores cortes de energía en Estados Unidos ocurrieron en Texas, y afectaron a más de 4 millones de hogares y negocios. Más de 250.000 personas también se quedaron sin electricidad en partes de los Apalaches, y otro cuarto de millón se quedó sin electricidad luego de una tormenta de hielo en el noroeste de Oregon, según poweroutage.us, que rastrea los informes de cortes de servicios públicos. Cuatro millones de personas se quedaron sin electricidad en México.
Los funcionarios de Texas solicitaron 60 generadores a la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA por sus siglas en inglés) y planearon priorizar hospitales y hogares de ancianos. El estado abrió 35 refugios para más de 1,000 ocupantes, dijo la agencia.
Más de 500 personas buscaron abrigo en un refugio en Houston. El alcalde Sylvester Turner dijo que otros centros de calentamiento tuvieron que cerrarse porque se quedaron sin electricidad.
Las empresas de servicios públicos de Minnesota a Texas implementaron una estrategia de apagones continuos para aliviar la carga de las redes eléctricas que se esfuerzan por satisfacer la demanda extrema de calor y electricidad.
Los apagones de más de una hora comenzaron alrededor del amanecer del martes en la ciudad de Oklahoma y más de una docena de otras comunidades, lo que interrumpió los calentadores, hornos y luces que funcionaban con energía eléctrica justo cuando las temperaturas rondaban los menos 8 grados.
Oklahoma Gas & Electric rescindió los planes para nuevos apagones, pero instó a los usuarios a configurar los termostatos a 68 grados Fahrenheit (20 grados Celsius), evitar el uso de electrodomésticos grandes y apagar las luces o los electrodomésticos que no estén usando.
Fuente: VOA