El congresista republicano por Florida, Mario Díaz-Balart, aseguró que el dictador Nicolás Maduro intentó abrir una línea de negociación que la Administración cerró por considerarla «falsa», sin que se perdiera tiempo en el intento.
«Maduro ha mandado múltiples cartas a Trump y a través de distintas personas ha tratado de mandar recados de que quiere trabajar con él… y la reacción de la Casa Blanca ha sido la misma en cada ocasión: NO», aseguró el congresista.
Sobre Richard Grenell, exfuncionario cercano al presidente Trump, Díaz-Balart fue contundente en sus declaraciones:
«Grenell está jugando su propia carta. No representa ni a la Casa Blanca ni a la política del Presidente. Parece que está tratando de rescatar a Maduro y a los hombres de ese cártel. Eso no está basado en los intereses de los Estados Unidos”.
Díaz-Balart reiteró la postura oficial: “La Casa Blanca ha sido muy clara: no hay negociación, no van a negociar ni van a aceptar negociación. El único que puede tomar decisiones es el Presidente, y está muy claro cuál es su actitud y la de toda la Administración”.