A casi quince días de que una jueza federal emitiera una orden de detención en su contra, Luis Miguel fue arrestado este martes 2 de mayo en Los Ángeles, Estados Unidos, según informó la agencia EFE. La medida está vinculada con una causa donde el cantante se enfrenta con su ex representante William Brockhaus.
En su demanda, Brockhaus exige una indemnización de más de un millón de dólares. Alega incumplimiento de contrato durante el periodo en el cual representó al ídolo méxicano: entre 2013 y 2015. Y si bien la justicia falló a su favor el año pasado, William sigue sin percibir esa suma. En enero fue embargado un auto de Luis Miguel (un lujoso Rolls Royce), pero no alcanzó para cubrir el monto que debe recibir el empresario.
Pero este no es el único conflicto legal que preocupa al cantante, ya que en enero su colega y compatriota Alejandro Fernández también presentó una demanda en su contra, debido a que Luis Miguel canceló un gira que iban a realizar juntos.
Esta causa con Fernández reviste además otro antecedente similar a la acusación de Brockhaus: el ídolo y su abogado no fueron a la audiencia establecida por un tribunal mexicano, argumentado que el domicilio al cual se le había enviado la citación no era el correcto.
Fuente: Infobae.com