Por CALEB JONES, Associated Press
HONOLULU (AP) — Un vecindario de nombre Vacationland desapareció el miércoles de la Isla Grande de Hawai a medida que la lava ingresaba a dos subdivisiones frente al océano, donde arrasó cientos de viviendas y transformó una bahía en roca.
El flujo ardiente cubrió Vacationland completamente, mientras que en la cercana subdivisión de Kapoho sólo quedaron de pie algunas construcciones, dijeron funcionarios del Servicio Geológico de Estados Unidos.
“La bahía está completamente llena (de lava) y la costa se encuentra al menos 0,8 millas (1,2 kilómetros) hacia afuera de su ubicación original”, dijo la geóloga Wendy Stovall. “Vacationland ha desaparecido, ya no hay evidencia de ninguna propiedad allí. En el extremo norte hay sólo algunas viviendas en el área de lotes de playa (de Kapoho)”.
Mark Johnson, uno de los residentes, guarda esperanzas de que su vivienda en una granja de cítricos sea una de las que aún están en pie. Su propiedad frente al mar se encuentra en una cresta cerca de la base del cráter Kapoho, y cree que la lava podría no haber pasado por allí.
“Básicamente estamos arriba de esa colina, así que por ahora seguimos bien”, afirmó Johnson.
Pero se ha resignado a la posibilidad de que pudiera perder su querida granja, a la que no tiene acceso incluso si la lava no la cubre. La propiedad no está lejos del lago en un cráter que el flujo de lava evaporó días antes de ingresar a su vecindario.
“De hecho, como que me siento en paz”, dijo Johnson acerca de la posibilidad de perder la casa en la que ha vivido 28 años. “Siento que he tenido una experiencia realmente maravillosa”.
Las autoridades del condado dijeron que los dos sectores tienen 279 viviendas, y se teme que la mayoría hayan quedado destruidas por el reciente ingreso de la lava a esas zonas bajas.
“A lo largo de prácticamente dos días, toda esa área fue cubierta por lava”, afirmó Stovall.
La roca fundida del volcán Kilauea ya destruyó al menos 117 viviendas en los vecindarios Lanipuna Gardens y Leilani Estates, donde hace más de un mes comenzó a salir lava. La cifra total de casas destruidas en la erupción ronda las 400.
Los científicos siguen registrando actividad volcánica vigorosa. Aunque sólo una fisura sobre el terreno está arrojando lava y la altura de la que sale ha disminuido en los últimos días, “es realmente imposible decir” cuándo concluirá, señaló Stovall.