El aumento de los precios en Estados Unidos se aceleró en enero, según cifras del Departamento del Trabajo publicadas el miércoles, lo que cambió las tendencias de las bolsas de Europa y amenaza con una jornada negra en Wall Street.
El Índice de Precios al Consumidor (CPI) avanzó 0,5% con relación a diciembre, en datos ajustados a las variaciones estacionales, mientras que los analistas esperaban un alza de 0,4%. Fue su mayor aumento desde septiembre.
El haber superado las expectativas de economistas hará que el impacto se sienta en las bolsas. Antes de la apertura de las negociaciones en Wall Street, los futuros del Dow Jones sufrían una pérdida de hasta 500 puntos. Las bolsas europeas, que venían teniendo aumentos cercanos al 1%, revirtieron la tendencia en menos de 15 minutos y entraron en terreno negativo, aunque luego moderaron las pérdidas.
Se espera que un alza de la inflación impulse a un aumento de la tasa de interés por parte de la Reserva Federal, así como un crecimiento en el rendimiento de los bonos del Tesoro.
La Fed subiría la tasa para desalentar los préstamos e incentivar los depósitos, logrando reducir el circulante de dinero. De esta forma, los consumidores e inversionistas prefieren aprovechar los altos intereses, generando olas de venta en acciones.
A comienzos de febrero, la divulgación de un reporte que marcaba un aumento de los salarios en enero desató temores por un aumento inflacionario y marcó la peor semana de Wall Street en meses.
Fuente: Infobae.com