El ex presidente uruguayo José Mujica expresó este lunes desde Madrid su solidaridad con el líder opositor venezolano Leopoldo López, que acaba de cumplir 1.000 días en prisión.
«No me gustan los presos políticos en ninguna parte del mundo», dijo Mujica, respondiendo a una pregunta que mencionó la situación carcelaria de López.
«Tengo solidaridad de preso con todos los presos políticos del mundo, cualquiera sea la causa», añadió el ex mandatario sin nombrar al opositor venezolano.
Así, el ex guerrillero tupamaro recordó su paso por prisión, donde estuvo más de una década detenido por la última dictadura uruguaya en duras condiciones por su militancia izquierdista.
Por su parte, López cumple este lunes 1.000 días de presidio en la cárcel militar de Ramo Verde, donde efectúa una condena de casi 14 años, acusado por el chavismo de incitación a la violencia durante las protestas opositoras de 2014, que dejaron 43 muertos.
Mujica, de 81 años y actualmente senador, alabó el «buen camino» emprendido por la Iglesia católica para facilitar el diálogo en curso entre el régimen de Nicolás Maduro y la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD).
Igualmente lamentó que haya «una crispación, una incapacidad somática como para poder dialogar de buena fe», pero aseguró que no ve «otra salida» que un entendimiento final entre el chavismo y sus detractores.
En cuanto a la crisis económica, que el oficialismo suele culpar a un «boicot internacional», Mujica agregó que «el primer problema que tiene Venezuela, es la dependencia petrolera», donde el 96 por ciento de las divisas extranjeras provienen de las exportaciones de petróleo. Según argumentó, dicha política «le devastó la cultura productora de alimentos», ya que el país «se acostumbró a importar la comida porque salía más barato».
Fuente: Infobae.com
