El exmilitar e investigador federal Héctor Schwerert reveló detalles inéditos sobre el involucramiento directo del régimen cubano en el narcotráfico, basándose en su experiencia en operaciones de inteligencia de EE. UU.
“Todo comenzó con la creación del Departamento de las Américas en Cuba”, aseguró Schwerert, explicando que desde allí se coordinaban las operaciones con los cárteles colombianos.
Como miembro de U.S. Customs, Schwerert formó parte de una plataforma de monitoreo en Miami que rastreaba vuelos y barcos sospechosos en tiempo real. «Teníamos acceso a cada movimiento», afirmó.
Detalló que tuvo acceso a información sensible, incluyendo la confesión de un abogado narco capturado en Miami y el testimonio de un exembajador panameño que desertó, ambos implicando a diplomáticos y militares cubanos.
Según el exagente, se identificó que vuelos con droga aterrizaban en Camagüey y Varadero, y que barcos madre con marihuana usaban las costas cubanas como punto intermedio para llegar a Florida.
La revelación más impactante fue un plan encubierto para capturar en alta mar al almirante Aldo Santa María, jefe de la Marina cubana. “Íbamos a interceptarlo mientras pescaba, pero la operación fue cancelada por órdenes del más alto nivel del gobierno de Estados Unidos”, denunció.
Schwerert concluyó que la implicación de Cuba no es un rumor, sino una operación criminal de Estado documentada en archivos federales.