VARSOVIA (AP) — El gobierno centroderechista polaco del primer ministro Donald Tusk sobrevivió el viernes a un voto de confianza solicitado por la oposición tras la filtración de grabaciones clandestinas realizadas a conversaciones personales entre ministros y otros altos funcionarios.
La votación fue de 236-155 a favor del gobierno en la Sejm, la cámara baja del parlamento. El resultado significó un revés para Jaroslaw Kaczynski, titular del partido nacionalista Derecho y Justicia, que la pidió. Kaczynski acusa a Tusk de provocar una crisis política y de incompetencia en el gobierno.
El ministro del Interior, Bartlomiej Sienkiewicz, sobrevivió a otro voto de confianza pedido por la oposición.
El mes pasado, la revista Wprost difundió grabaciones clandestinas de conversaciones entre dirigentes. En una se escucha al presidente del Banco de Polonia, Marek Belka, y a Sienkiewicz discutir cómo el banco central podría ayudar al partido oficialista a ganar la reelección en 2015, en aparente violación de la independencia de la institución.
En otra, se escucha decir al canciller Radek Sikorski que la alianza de Polonia con Estados Unidos era inútil. Eso sucedió antes de que el presidente Barack Obama, ante la crisis en Ucrania, prometiera ayudar a reforzar la seguridad polaca. En respuesta a la filtración, el presidente Bronislaw Komorowski destacó la importancia de la alianza.
Poco después de las filtraciones, el gobierno lucía frágil y el propio Tusk dijo que tal vez la única salida era convocar a elecciones anticipadas. Pero en las últimas dos semanas ha sobrevivido a dos votos de confianza, el primero solicitado por el propio Tusk de cara a negociaciones en la Unión Europea.
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