“Hacía 10 días que habíamos llegado de Puerto Rico, Meta, él tenía mucho temor, mucho miedo porque en agosto la guerrilla tiene por costumbre en nuestro país, hacer cualquier acto que demuestre que ellos están allí,porque se cumple otro aniversario de su creación. Entonces ellos quedaron muy asustados y nos transmitieron ese temor y ese viernes en la tarde, cuando yo hablé con él sobre las seis él me dijo: -Amor, si no te puedo contestar más tarde es porque aquí está la gente. Cuando ellos se refieren a la gente uno entiende que la guerrilla está por el pueblo”.
“En la noche cuando lo llamé el compañero que me contestó me dijo que no podía hablar y ya el sábado no había línea telefónica. A partir de ese momento nos enteramos desafortunadamente que empezaban los combates y así duraron hasta el domingo en la noche donde dijeron que lo más seguro era que el lunes nos los traían, y desafortunadamente en el amanecer de ese lunes fue que precisamente te el avión fantasma mientras fue a hacer un abastecimiento de combustible se metió la guerrilla que tenía unas tanquetas en nuestro país. Aprovechan los vehículos pesados cuando van a hacer arreglos en las ciudades y los arman como si fuesen carros blindados”.
“Ellos después de tres días de combate se habían quedado sin municiones, desafortunadamente fueron capturados por la guerrilla. Fueron tres días y es una cosa que la guerrilla les dijo: -Nosotros no los matamos a ustedes porque ustedes no se rindieron e hicieron la batalla”.