Un fiscal que había estado encabezando una pesquisa penal sobre Donald Trump antes de abandonarla el mes pasado dijo en su carta de renuncia creer que el exmandatario es “culpable de numerosas infracciones de delitos graves”, y expresó su desacuerdo con la decisión del fiscal de distrito de Manhattan de no buscar una acusación formal.
En la misiva, publicada el miércoles por The New York Times, Mark Pomerantz le dijo al fiscal de distrito Alvin Bragg que había “pruebas suficientes para establecer la culpabilidad del señor Trump más allá de una duda razonable” de las acusaciones de que falsificó estados financieros para conseguir créditos y pulir su imagen de empresario acaudalado.
“El equipo que ha estado investigando al señor Trump no tiene duda acerca de si cometió delitos: lo hizo”, escribió Pomerantz.
Pomerantz y Carey Dunne, con quien encabezaba la pesquisa sobre Trump, renunciaron el 23 de febrero después de chocar con Bragg sobre el futuro del caso.
Ambos eran destacados fiscales a los que se les encargó dirigir la investigación. Comenzaron la pesquisa bajo el exfiscal de distrito Cyrus Vance Jr., y Bragg les pidió que continuaran en ella cuando él asumió el cargo en enero. Tanto Vance como Bragg son demócratas.
En su carta de renuncia, Pomerantz escribió que Vance les había ordenado a ambos fiscales que presentaran pruebas a un jurado investigador y buscaran encausar a Trump y otros acusados “lo más pronto que razonablemente sea posible». Ningún expresidente ha sido acusado jamás de un delito.
“Creo que su decisión de no enjuiciar a Donald Trump ahora, y con los expedientes actuales, es equivocada y totalmente contraria al interés público”, escribió Pomerantz.
Danielle Filson, portavoz de Bragg, dijo en un comunicado el miércoles en la noche que prosigue la indagación a Trump y que un “equipo de fiscales experimentados está trabajando a diario para dar seguimiento a los hechos y la ley. No hay nada que podamos o debamos decir en esta coyuntura sobre una investigación en curso”.
Se envió un mensaje a un abogado de Trump para que hiciera declaraciones sobre el asunto. El exmandatario ha descrito la investigación como una “cacería de brujas” con motivos políticos.
The Associated Press solicitó copias de las cartas de renuncia de Pomerantz y Dunne de acuerdo con la ley de registros abiertos de Nueva York, pero la oficina del fiscal de distrito rechazó la petición el 25 de febrero.
En su negativa, la oficina dijo: “El asunto penal al que ambos individuos fueron asignados continúa pendiente; por tal motivo, la difusión pública de las cartas que reflejan deliberaciones y opiniones internas sobre una investigación en curso podría interferir con esa pesquisa».
Fuente: AP