El secretario de Defensa estadounidense Mark Esper defendió el viernes la decisión de desviar miles de millones de dólares asignados a proyectos militares para ayudar a pagar la construcción del muro prometido por el presidente Donald Trump en la frontera con México.
Un periodista preguntó a Esper sobre las críticas de legisladores tanto demócratas como republicanos en el Congreso.
“La seguridad fronteriza es seguridad nacional, y la seguridad nacional es nuestra misión”, dijo Esper en declaraciones al margen de una conferencia sobre seguridad internacional en Múnich. “La medida que tomamos es legal bajo la ley y no debería sorprender a nadie, y es todo lo que diré por ahora”.
El Pentágono anunció el jueves que Esper aprobó el desvío de 3.800 millones de dólares asignados por el Congreso para la fabricación de aviones de combate F-35 y otros proyectos militares. Los fondos irán al Departamento de Seguridad Nacional para construir tramos del muro. El Pentágono indicó que podría haber más medidas similares para que Trump cumpla la promesa central de su campaña electoral.
Legisladores demócratas y algunos republicanos expresaron su disgusto.
“El pedido de reprogramación de hoy confirma una vez más que el presidente está obsesionado con cumplir una promesa de campaña a expensas de nuestra seguridad nacional”, dijo el demócrata Adam Smith, que preside la Comisión de las Fuerzas Armadas de la cámara baja. “Este gobierno ya ha robado miles de millones al Departamento de Defensa para empezar a construir el muro del presidente vanidoso y hoy repite esas malas medidas”.
El republicano Mac Thornberry, un partidario del muro, sostuvo que el papel constitucional del gobierno es recomendar cómo se gasta el dinero de los contribuyentes, pero que la decisión final corresponde al legislativo.
En su campaña por la candidatura presidencial republicana en 2016, Trump prometió que México pagaría el muro. México se negó.
Esper aprobó una solicitud del Departamento de Seguridad Nacional para recanalizar 3.800 millones de dólares al muro fronterizo, y el Pentágono reconoció que podría haber más recortes a fin de tener más fondos disponibles para el principal compromiso de campaña de Trump.
La decisión del jueves ha intensificado las marcadas divisiones entre Trump y miembros del Congreso que se oponen a la utilización de recursos militares para la construcción del muro. Trump ha dicho repetidamente que su “muro grande y hermoso” está siendo pagado por México, aunque esto jamás ha sido así.
A pesar del rechazo en el Congreso, Trump no enfrentó consecuencias por transferencias similares que efectuó el año pasado cuando el Pentágono canceló decenas de proyectos militares de construcción para liberar 3.600 millones de dólares y transfirió 2.500 millones de dólares de dinero para el combate a las drogas.
En conjunto, Trump ha obtenido poco más de 3.000 millones de dólares para la construcción de barreras fronterizas mediante las vías legislativas ordinarias y lo que le conceden queda sujeto a las restricciones que impongan los legisladores. Y Trump ha utilizado diversas autoridades de transferencia y emergencia a fin de canalizar casi 7.000 millones de dólares adicionales procedentes de la declaración de emergencia, un fondo de dinero decomisado por la policía y recursos para actividades militares antinarcóticos.
Bob Salesses, subsecretario de Defensa, dijo el jueves a la prensa que con el plan más reciente se construirán vallas de 9 metros (30 pies) en terrenos federales en seis zonas fronterizas: San Diego y El Centro, California; Yuma y Tucson, Arizona, y El Paso y Del Rio, Texas.
Salesses afirmó que el Departamento de Defensa concluyó después de una revisión que todos los sectores son zonas “de tráfico de narcóticos de alta intensidad” y señaló que los recursos tomados de operaciones militares y cuentas de mantenimiento serán transferidos al fondo de acciones contra el narcotráfico para que de ahí se destinen a las barreras, caminos e iluminación.
El Departamento de Seguridad Nacional solicitó el mes pasado al Pentágono financiar la construcción de 436 kilómetros (271 millas) de muro fronterizo a un costo de unos 5.500 millones de dólares, como parte de una acción antinarcóticos. Esper aprobó una parte de esa cantidad.
A la pregunta de si se quitarán más recursos a defensa este año, Salesses dijo que hay discusiones al interior del Departamento, pero no se ha decidido nada aún. Reconoció que podrían cancelarse más proyectos de construcción militar este año a fin de tener dinero para el muro.
El año pasado, el Pentágono quitó financiación a proyectos como escuelas, polígonos de tiro e instalaciones de mantenimiento en 23 estados, 19 países y tres territorios estadounidenses. Este proceder, que afectó numerosos proyectos en distritos y estados republicanos, causó ira en el Capitolio.
Trump adoptó la medida menos de dos meses después de que promulgara un enorme paquete de asignaciones y pocos días después de que el gobierno presentara su presupuesto para el año fiscal 2021. El presupuesto incluye una solicitud de 2.000 millones de dólares para el muro, cantidad mucho menor a la que Trump pidió el año pasado, lo cual refleja que el mandatario tiene más recursos disponibles que puede canalizar de inmediato a esa infraestructura.
Fuente: AP