Miami.- El escándalo generado por el caso de la destitución del ministro cubano Alejandro Gil, acusado de robo y corrupción, podría convertirse en un castigo ejemplarizante para el dictador Miguel Díaz-Canel, de quien era muy cercano el defenestrado ministro.
En Actualidad Radio, este martes, los colegas Reinaldo Escobar y Guenadi Rodríguez estuvieron analizando, junto a Roberto Rodríguez Tejera y Juan Camilo Gómez, los detalles del caso. Entre lo que revelaron está que el mismo Gil ha confesado graves datos.
Según lo explicado, las investigaciones están siendo llevadas por el Ministerio del Interior, de forma secreta y aún no se ha podido comprobar la detención oficial del exministro, ni dónde permanece luego de su salida del poder.
Según nuestros invitados, la remoción de Alejandro Gil en Cuba obedece más a los posibles delitos que cometió, que a una posición que pueden pretender seguir utilizando para continuar controlando el poder.
Agregaron, además, que otra de las detenciones que se ha conocido en las últimas horas es la del dueño de la empresa Media Luna, encargada de desarrollar proyectos sociales.
Reinaldo Escobar, desde Cuba, asegura que lo que se está viviendo en la Isla es un «cóctel mortal que podría atentar incluso contra la estabilidad del régimen y que podría ser una de las hipótesis del por qué se está tomando esta medida».
Explicó, además, que los apagones que han ocurrido en las últimas semanas, especialmente en las provincias orientales, seguirán y «van dos veces al día, 6 horas de día y 6 horas en la noche, y aunque no han llegado a La Habana, también se sienten, pero no tan prolongados».
