Empezar con una “V” de victoria siempre es importante. Y el Heat este miércoles colocó esa letra en su casillero, arrancando con el pie derecho la temporada.
El quinteto de Miami, con un gran juego de conjunto, consiguió en Orlando un gran triunfo 108-96 ante un Magic que se vio desbordado en la segunda parte.
Con el marcador en contra, el Heat prendió los motores en el tercer cuarto y a toda máquina no solo le dio la vuelta al marcador, sino que fue estirando su ventaja hasta terminar el parcial con 11 puntos de ventaja (80-69).
Dio igual el quinteto que Miami tuviera en la cancha, la energía siempre fue la misma y todos aportaron algo. Eso le permitió dominar en rebotes, asistencias, puntos en la pintura, jugadas de contraataque y conseguir el mejor porcentaje de tiros al aro, con seis jugadores con doble dígitos.
Hassan Whiteside, quien fue el mejor de Miami con 18 puntos, 14 rebotes y cuatro tapones, batalló fuerte bajo el aro y se llevó el premio.
Goran Dragic se encendió en la segunda mitad y guió bien al equipo con 16 puntos, seis asistencias y seis rebotes.
Mientras Justise Winslow, quien era el mejor de la primera mitad con nueve cartones, terminaba con 15 puntos y ocho rebotes. Los otros dos abridores Dion Waiters y Luke Babbitt contribuyeron con nueve y ocho puntos respectivamente.
En tanto, el banco de Miami con 42 puntos resultó decisivo. Esta segunda unidad estuvo liderada por Tyler Johnson con 15 puntos y seis rebotes y le siguieron James Johnson con 11 y Willie Reed 10 y seis rebotes.
Por Orlando destacaron Evan Forunier con 20 puntos, Nikola Vucevic con 17, Elfrid Payton 16, Serge Ibaka con 14 y Aaron Gordon con 12.
La primera mitad fue sumamente reñida y al final favoreció 53-50 al Magic, después de que ganara el primer cuarto 27-23 y perdiera el segundo 27-26.
En el tercero todo cambió, el Heat impuso su ritmo vertiginoso y se llevó el cuarto 30-16.
En el último continuó la pesadilla para el Magic, que no encontraba la manera de detener a un inspirado equipo de Miami que llegó a tener 19 puntos de ventaja.
Al final Orlando por fin reaccionó y se acercó, pero todo el pescado ya estaba vendido y el dúo Dragic-Whieside con un Alley-oop terminó poniéndole la tapa al pomo, cerrando un buen triunfo ante un exigente rival.