El fiscal especial Robert Mueller, encargado de investigar la trama rusa, anunció nuevos cargos contra Alex Van Der Zwaan, un abogado de una prestigiosa firma de Nueva York al que acusa de mentir al Buró Federal de Investigaciones (FBI).
Van Der Zwaan tiene previsto comparecer hoy por a las 14.30 hora local (19.30 GMT) ante la Corte del Distrito de Columbia.
Según el escrito de acusación de Mueller, el acusado tuvo contactos con Rick Gates, el que fuera «número dos» de la campaña del ahora presidente, Donald Trump, y que está acusado de varios cargos, incluido lavado de dinero, dentro de la investigación de la trama rusa.
Según el escrito de acusación, Van Der Zwaan «deliberadamente hizo declaraciones materialmente falsas, ficticias y fraudulentas» tanto al FBI como a la oficina del fiscal especial Mueller cuando fue interrogado el 3 de noviembre de 2017.
Robert Mueller ocupa el cargo de fiscal especial y se encarga de investigar los posibles lazos entre miembros de la campaña del presidente y el Gobierno ruso, al que las agencias de inteligencia de EEUU acusan de interferir en las elecciones de 2016.
Supuestamente mintió sobre un informe que elaboró para el Ministerio de Justicia de Ucrania con el objetivo de preparar un juicio que tenía como protagonista a la ex primera ministra Yulia Timoshenko, que desde mayo de 2010 tuvo que hacer frente a varios procedimientos legales en su contra.
En concreto, según Mueller, el acusado mintió sobre los contactos que había tenido acerca del informe con Rick Gates.
El acusado no desveló que la última vez que se había comunicado con Gates por vía telefónica fue en agosto de 2016 y tampoco dijo que se vieron en persona por última vez en 2014.
En octubre de 2017, Rick Gates se entregó al FBI y se declaró no culpable de los 12 cargos presentados en su contra, aunque ahora se está planteando colaborar con la Justicia y declararse culpable, según han desvelado medios locales en los últimos días.
Gates, de 45 años y cuyo nombre era casi desconocido hasta que Mueller presentó los cargos en su contra, era el protegido de Paul Manafort, quien fue el jefe de la campaña electoral de Trump entre mayo y agosto de 2016.
Tanto Gates como Manafort están acusados de crear una «red de entidades y cuentas bancarias» en diferentes países para ocultar hasta 75 millones de dólares que obtuvieron del Gobierno prorruso de Ucrania y de otros oligarcas rusos, a los que ayudaron, por ejemplo, a mejorar su imagen en Estados Unidos.
Precisamente, Manafort, que dirigió la campaña electoral de Trump entre mayo y agosto de 2016, tuvo que dimitir tras descubrirse que había ocultado a las autoridades un pago de 12,7 millones de dólares que recibió por asesorar al ex presidente ucraniano Víktor Yanukóvich (2010-2014), vinculado a Rusia.
Una vez que Manafort dimitió, Gates siguió participando en la campaña de Trump y llegó a formar parte del equipo que preparó la transición una vez que el magnate ganó las elecciones en noviembre.
Hasta el momento, Mueller ha acusado a 13 rusos y tres compañías rusas de interferir en las elecciones de 2016.
Desde mayo de 2017, Robert Mueller ocupa el cargo de fiscal especial y se encarga de investigar los posibles lazos entre miembros de la campaña del presidente y el Gobierno ruso, al que las agencias de inteligencia de EE.UU. acusan de interferir en las elecciones de 2016.
El cargo de fiscal especial es independiente del Gobierno, por lo que se asegura la neutralidad de la investigación.
Hasta el momento, Mueller ha acusado a 13 rusos y tres compañías rusas de interferir en las elecciones de 2016.
También ha presentado cargos contra cuatro personas relacionadas con el actual mandatario: Gates, Manafort, su exasesor de seguridad en la Casa Blanca Michael Flynn, y otro exasesor, George Papadopoulos, que trabajó para el magnate durante las elecciones.
Fuente: Infobae.com