El Gobierno de Estados Unidos está «monitorizando de cerca» la suspensión del acuerdo militar intercoreano por el posible despliegue de tropas de Corea del Norte, tal y como han denunciado en los últimos días fuentes gubernamentales surcoreanas.
«Obviamente es algo que continuamos monitorizando de cerca. No tenemos ninguna información específica que proporcionar ahora mismo sobre los supuestos despliegues norcoreanos», ha declarado el portavoz del Departamento de Defensa de Estados Unidos, el general Patrick Ryder, en una rueda de prensa.
El portavoz, que ha remarcado que la posición estadounidense se centra en la «disuasión extendida» hacia Seúl y Tokio, cuyo apoyo «seguirá siendo férreo», ha remarcado que el secretario del Pentágono, Lloyd Austin, ha regresado de la península de Corea destacando la importancia de «preservar la paz y la estabilidad».
Por otro lado, Ryder ha confirmado que Pyongyang lanzó un satélite militar que ha entrado en órbita: «Somos conscientes de que Corea del Norte llevó a cabo el lanzamiento de un vehículo espacial. Sabemos que ha entrado en órbita y que se trataba de tecnología de misiles balísticos. Pero más allá de eso, en este momento no voy a dar más detalles», ha declarado.
Estas declaraciones tiene lugar después de que las autoridades de Corea del Norte informaran de que el líder norcoreano, Kim Jong Un, había recibido imágenes obtenidas a través del satélite militar de varios «objetivos» estadounidenses, entre los que se encontraría la Casa Blanca o el Pentágono.
Por su parte, la Inteligencia de Corea del Sur apunta a que este lanzamiento fue realizado a raíz de la cooperación entre Rusia y Corea del Norte tras la cumbre celebrada entre el presidente ruso, Vladimir Putin, y Kim el pasado mes de septiembre tras dos intentos fallidos por parte de Pyongyang de poner en órbita un satélite militar.