La televisión estatal cubana presentó este martes a cuatro detenidos como presuntos miembros del grupo “Clandestinos”, que desde inicios de año ha vandalizado bustos del héroe nacional de Cuba, José Martí, e imágenes propagandísticas del gobierno.
En un reportaje que contaba con el testimonio de Panter Rodríguez Baró, de 44 años y Yoel Prieto Tamayo, de 29 años, detenidos por supuestamente pertenecer a ese grupo y sobre cuyo arresto reportó el diario oficial Granma el pasado 8 de enero, la televisión cubana mostró imágenes de cámaras de vigilancia donde se veían dos hombres acercándose caminando por las inmediaciones de la redacción de la revista Bohemia.
Los trabajadores de Bohemia denunciaron posteriormente que el busto de Martí realizado por el escultor cubano José Delarra, ya fallecido, que se encuentra en terrenos de la revista, tuvo que ser restaurado tras la acción de Clandestinos, pero no mostraron fotos de la escultura intervenida.
En la emisión televisiva también presentaron a Guillermo Mendoza, quien fue detenido por prestar su celular para filmar las acciones de Rodríguez y Prieto, así como Jorge Ernesto Pérez, primo de Panter, a quien se le acusa por mantener comunicación con la activista cubana radicada en Miami Ana Olema Hernández, quien, según el reportaje, habría pagado por las pintadas.
El reportaje mostró dos presuntos recibos de transferencias por Western Union tanto de Hernández como de su esposo por valor de $100 cada una. Según el teniente coronel Francisco Estrada, enviaron más de $1,000 a Cuba para “actividades enemigas”, de los cuales $600 fueron en pago a Rodríguez Baró por las pintadas a los bustos de José Martí, según el reportaje.
El audiovisual presenta a Hernández como una persona “al servicio del gobierno de Estados Unidos y la mafia anticubana radicada en la Florida”. El gobierno cubano le adjudica el calificativo de “terrorista”.
Hernández dijo en Facebook que es “imposible” dar crédito a un reportaje hecho “por una prensa al servicio de una dictadura”.
“Estaríamos orgullosos de apoyar cualquier movimiento de resistencia civil y cívica en Cuba, pero esas acusaciones son falsas. Ese movimiento nació dentro de Cuba espontáneamente y ahora ellos quieren decir que no, que es una fabricación del extranjero porque no quieren reconocer que el descontento popular está escalando”, añadió.
Hernández dijo que el cubano es un “sistema represivo” que utiliza los medios y la propaganda para “perseguir y hostigar al pueblo cubano”.
“Esto es un crimen de Estado”, sentenció.
La televisión cubana no precisó cuándo los detenidos serán juzgados, pero coqueteó con la idea del fusilamiento. “Cabría reflexionar que si en una época pasada ocho estudiantes de medicina fueron asesinados injustamente por un supuesto ultraje a la tumba de un prócer español, ¿qué merecen estos serviles? Para su suerte, la Revolución cubana es justa”, zanjó.
Según el oficialismo, fueron 11 los bustos y tres los carteles propagandísticos vandalizados por Rodríguez y Prieto. La prensa al servicio del gobierno dijo que Martí era “un símbolo de la Revolución cubana”. Los oficiales entrevistados afirmaron que Rodríguez y Prieto también pintaron carteles con la consigna “Yo voto no” contra la reforma constitucional el pasado año.
La teniente Milagro Cabrera, entrevistada para el material, dijo que en allanamientos a las viviendas de ambos hombres pudieron encontrar evidencias que guardaban relación con los hechos.
“Se ocuparon envases que tenían en su interior sangre de animal porcino. En el caso del ciudadano Panter se practicó un registro en el garaje donde fueron ocupados objetos que contenían sustancias que se logró establecer que eran drogas, en específico cocaína”, dijo Cabrera.
Según la televisión cubana, los otros tres detenidos también consumen y trafican drogas.
Con el nombre sacado de una popular película cubana del director Fernando Pérez que aborda la lucha clandestina contra el régimen de Fulgencio Batista, el grupo ha evitado dar detalles que permitan identificar quiénes lo componen. También utilizan imágenes de La Casa de Papel, una popular serie televisiva española. Un video con un encapuchado que afirma ser miembro se ha difundido a través de Facebook, pero a la prensa solo responden a través de chats escritos y con escasas palabras.
En un mensaje enviado a el Nuevo Herald, un supuesto representante de Clandestinos que no quiso ser identificado dijo que no conocía a Panter Rodríguez ni a Yoel Prieto. El grupo reivindicó varias acciones a lo largo de la isla después de la detención de estos ciudadanos.
El supuesto representante de Clandestinos dijo a este diario que no eran un grupo político y que con la sangre de cerdo sobre Martí buscaban expresar que “el apóstol sangra por lo que han hecho con él y la represión en la que vive el pueblo cubano”.
Desde inicios de este año, los internautas cubanos debaten si las acciones de Clandestinos se enmarcan dentro de la protesta o el vandalismo, o si es una estrategia de la temida Seguridad del Estado para justificar la represión contra los disidentes.
El audiovisual de la televisión oficialista arremetió contra diferentes líderes e influyentes del exilio cubano en Miami, entre ellos el presentador Alex Otaola, Aldo Roberto Rodríguez Baquero y el actor Roberto San Martín, quienes, según el reportaje, en mayor o menor medida habrían mostrado apoyo a las acciones de Clandestinos.
Otaola, uno de los youtubers y presentadores más conocidos de la comunidad cubana en Miami y la isla, lamentó que el gobierno continúe “mintiendo”.
“Como siempre es una manipulación, una forma de culpar a otros de su sistema desastroso. Se trata de una comedia ridícula aprovechándose de cualquier excusa para crear enemigos invisibles”, dijo a el Nuevo Herald.
Fuente: El Nuevo Herald