Dos personas que habían dado positivo en las pruebas de detección del coronavirus murieron en Florida, marcando los primeros fallecimientos en la costa este atribuidos al brote en Estados Unidos, confirmaron las autoridades de salud.
El Departamento de Salud de Florida informó que las dos personas que murieron tenían 70 años y habían viajado al extranjero. El anuncio elevó el número de muertes en EEUU por la cepa a 17 (14 se habían registrado en el estado de Washington y una en California).
Una de las muertes en Florida fue la de un hombre con problemas de salud previos en el condado de Santa Rosa, en la región de Panhandle, según la declaración. El departamento de Salud añadió que el segundo deceso fue el de un anciano en el condado de Lee, en el área de Fort Myers. La declaración no indicó dónde habían viajado las víctimas.
Helen Aguirre Ferre, vocera del gobernador de Florida Ron DeSantis, confirmó las muertes y otros dos nuevos casos en el sur de Florida.
Uno de los nuevos casos sólo se confirmó después de que la persona muriera, según la declaración. Los otros dos que se confirmaron positivos el viernes fueron el de un hombre de 65 años y otro de 75 años, ambos en el condado de Broward. El departamento de Salud del estado informó que ambos hombres han sido aislados.
Las autoridades habían anunciado previamente que cinco residentes de Florida, que habían viajado a China, también han sido puestos en cuarentena en otros lugares después de dar positivo en las pruebas.
El Minsiterio de Salud continuó diciendo el viernes que el riesgo para los habitantes del estado sigue siendo bajo, ya que la mayoría de los casos se han concentrado en el estado de Washington y California, donde un crucero está siendo retenido frente a la costa después de que un pasajero de un viaje anterior muriera y otros se infectaran.
Por otro lado, según ha informado el Departamento de Sanidad de Utah, una persona ha contraído el coronavirus tras haber estado a bordo del crucero Grand Princess. El paciente, con una edad cercana a los 60 años, requirió atención médica tras regresar a su casa y presentar algunos síntomas, por lo que actualmente se encuentra en cuarenta.
El crucero Grand Princess, con más de 2.500 personas a bordo, continúa en cuarentena frente a las costas de la ciudad de San Francisco, en California, después de que uno de los pasajeros que viajó a bordo de la embarcación hace dos semanas muriera tras dar positivo de coronavirus. El crucero, que se dirigía a Hawai, volvió el jueves a la ciudad de San Francisco después de que varios pasajeros y miembros de la tripulación comenzaran a experimentar síntomas.
Este mismo viernes, el presidente de EEUU, Donald Trump, firmó una nueva partida de gasto de emergencia para la lucha contra el coronavirus, estimada en 8.300 millones de dólares.
Infobae.-