El comisionado de Miami-Dade, Juan Carlos Bermúdez, expresó en Actualidad Radio su profunda preocupación por la construcción de una instalación para migrantes en el sur del condado, confirmando que las autoridades locales no fueron informadas y advirtiendo sobre posibles conflictos de jurisdicción y daños ambientales.
En entrevista con Yoly Cuello, Bermúdez explicó que la decisión del estado de Florida de usar un antiguo aeródromo para albergar migrantes detenidos ha sido cuestionada por su alto valor ecológico. “La mayoría de los comisionados no sabíamos nada hasta que lo vimos en la prensa”, afirmó. “Ese sitio fue descartado hace décadas para un aeropuerto precisamente por razones ambientales”.
El terreno, conocido popularmente como “Alligator Alcatraz”, pertenece al condado y, según el comisionado, su valor podría alcanzar los 160 millones de dólares, muy por encima de los 20 millones ofrecidos como compensación. Aunque el estado invocó poderes de emergencia para tomar el área, Bermúdez advirtió que “el condado tiene derecho a recibir el valor justo. Esto podría terminar en una disputa legal”.
El gobierno federal financiaría el proyecto a través del Departamento de Seguridad Nacional, lo que refuerza su magnitud. “Aquí hay muchas preguntas sin respuesta: el impacto ambiental, el proceso legal y, sobre todo, la falta de información transparente”, concluyó el comisionado.