“El problema más grande sigue siendo que los sindicatos dicen que los empleados ya han hecho sacrificios en el pasado y no pueden hacer sacrificios adicionales-continúa Migoya-Yo creo que a lo mejor lleguemos a un acuerdo de ambos lados”.
“Desde el punto de vista de los empleados, ellos entienden lo que estamos haciendo, creen por arriba de todo en el beneficio del Jackson, porque ven el futuro del Jackson. Lo mismo enfermeras que médicos, que todos los demás empleados. Naturalmente los sindicatos están tratando de defender los beneficios de esos empelados lo más posible. Y en eso estamos”.
“Una de las cosas que estamos hablando es de no tener aumentos este año, ni de aumentos regulares que se dan por el costo de vida. Esos dos aumentos hacen un total del 8% por año”.
Con respecto a las cuentas por cobrar que tenía el hospital, Migoya dice: “Esas cuentas se han reducido substancialmente. La manera en que pudimos absorber la pérdida este año, de 95 millones de dólares, fue básicamente recuperando muchas de esas cuentas que no se habían podido cobrar en el pasado
