Una subasta para la exploración petrolera en aguas profundas en Brasil procederá el viernes, luego que una decisión judicial amenazó con suspenderla.
Se trata de la primera vez que Brasil da a compañías privadas la oportunidad de operar por su cuenta yacimientos de presal _aquellos que están debajo de una capa de sal_, parte de las gestiones de privatización del presidente Michel Temer. Previamente, la estatal Petrobras tenía que tener al menos 30% de la participación.
El izquierdista Partido de los Trabajadores ha disputado el cambio y respaldó el pedido para suspender la licitación. El PT argumenta que la privatización privará al país de ingresos y empleos.
Un juez suspendió la subasta el jueves por la noche, pero la oficina de prensa del fiscal general dijo que ganó la apelación el viernes.
La Agencia Nacional del Petróleo de Brasil espera que los ocho bloques en licitación generen 36.000 millones de dólares en inversiones y otros 130.000 millones en regalías, ingresos e impuestos.
Fuente: Associated Press