A horas de que se confirme oficialmente la ruptura del PMDB con el gobierno brasileño, el Ejecutivo sufrió un nuevo golpe: el ministro de Ciudades, Gilberto Kassab, admitió públicamente haber propuesto a la banca del PSD que vote libremente sobre un eventual juicio político contra Dilma Rousseff.
Los 31 diputados del bloque tendrán la libertad de votar a favor o en contra del impeachment. Esto es clave para el futuro de la mandataria, dado que la Cámara de Diputados tendrá que decidir sobre el juicio político con una fragmentación récord: hay 25 bloques distintos.
Los diputados del PSD tendrán la libertad de votar a favor o en contra del impeachment.
A diferencia de lo que sucede con el PMDB, que este martes se reunirá para anunciar una posición oficial sobre la remoción del gobierno, el PSD no tiene reuniones previstas para ello.
La Cámara de Diputados votará sobre el juicio político para destituir a la mandataria con una fragmentación partidaria récord, según indicó el diario Folha do Sao Paulo. Hay muchos bloques con relativamente pocos legisladores. Ninguno resalta demasiado. En consecuencia, sea cual sea el resultado del proceso, la gobernabilidad se verá dificultada.
En efecto, son 25 los bloques de la Cámara baja. Los tres más numerosos no lo son tanto: el PMDB (69), el oficialista PT (58) y el PP (49) reúnen algo más de un tercio del total.
El Gobierno, que tiene asegurados hasta el momento 97 votos, requerirá de 172 para frenar el juicio político. El núcleo duro opositor, por su parte, tiene asegurados 111 sufragios para destituir a Rousseff, pero necesita 342. En una Cámara con 513 escaños, hay 305 en esa «ancha avenida del medio» que decidirá el rumbo de la cabeza del Ejecutivo brasileño.
La salida del PMDB
Dilma Rousseff perderá este martes a su principal aliado, el centrista PMDB, alineado mayoritariamente con el vicepresidente Michel Temer, y quedará un poco más cerca de su destitución por el Congreso.
El directorio del Partido Movimiento Democrático Brasileño (PMDB) se reunirá en Brasilia y deberá anunciar por aclamación su decisión de salir del gobierno, según la estatal Agencia Brasil.
Una primera señal de la ruptura se sintió la víspera con la renuncia del ministro de Turismo Henrique Alves, afiliado al PMDB, que argumentó que el diálogo «se agotó».
Una primera señal de la ruptura se sintió con la renuncia del ministro de Turismo Henrique Alves
Otros seis ministros podrían seguir su ejemplo y acatar el llamado de Temer de abandonar los cargos antes del 12 de abril.
Fuente: Infobae.com
