Foto tomada de www.WSJ.com
A Obama también se le espera para hacer una fuerte campaña para ayudar a elegir a la demócrata Hillary Clinton como presidente a lo largo de octubre, publica AP.
Un presidente teóricamente descansado regresó a la Casa Blanca después de una escapada de 16 días con su esposa, Michelle, sus hijas Malia y Sasha, y sus perros en la residencia vacacional de Martha’s Vineyard, Massachusetts. Jugó 10 partidos de golf y se fue a cenar ocho veces.
Según la nota de AP, Obama estará en la Casa Blanca aproximadamente un día antes de salir de nuevo mañana para evaluar los daños ocasionados por las inundaciones en Baton Rouge, Louisiana, en las que murieron al menos 13 personas y miles fueron desplazadas.
Obama se habría resistido a la presión de los residentes de Louisiana para que interrumpiera sus vacaciones para ir al encuentro con funcionarios y víctimas de las inundaciones. La Casa Blanca dijo que Obama fue permanentemente informado sobre la situación durante sus vacaciones. El candidato presidencial republicano Donald Trump llenó el vacío, creado por la ausencia de Obama, al recorrer la zona devastada el viernes con su compañero de fórmula, el gobernador de Indiana Mike Pence.
Obama también estuvo preparándose para un viaje a Asia a principios del mes próximo, probablemente su última gira de la región como presidente.
Con el Congreso descansando por siete semanas, Obama y su ayudantes probablemente se centrarán en lo que la Casa Blanca pueda obtener de los legisladores antes de que estos salgan de la ciudad para hacer campaña por la reelección. El Congreso regresará después del Día del Trabajo y la Cámara y el Senado tendrá sólo un mes para aprobar el paquete de leyes de ingresos y gastos correspondientes al final del año fiscal federal el 30 de septiembre, lo permitirá mantener al gobierno en funcionamiento.
Los legisladores planean salir de Washington de nuevo en octubre y no regresar hasta después de las elecciones del 8 de noviembre.
La Casa Blanca seguirá presionando por dinero para ayudar a combatir la propagación del virus Zika transmitida por mosquitos y el desarrollo de una vacuna. Las autoridades sanitaria de Florida detectaron la semana pasada el segundo foco de transmisión Zika, en territorio estadounidense, en el popular paraíso turístico de South Beach en Miami. Una sección del distrito de las artes de Wynwood de Miami fue el primero.
Obama pidió al Congreso $ 1.9 mil millones este año para la prevención Zika. Los republicanos ofrecieron $ 1.1 mil millones y añadieron ciertos condicionamientos que los demócratas objetaron, en respuesta incluyeron los correspondiente a la Planificación Familiar, lo que dejó la discusión en el Congreso, interrumpida a mediados de julio, en el limbo. Los legisladores podrían terminar de aprobar los recursos para la lucha contra el Zika a través de la ley de una ampliada ley de gastos.
A su vez, los legisladores indignados se han comprometido a mantener una candente discusión sobre los más de $ 400 millones que la administración de Obama entregó a Irán en enero. Los republicanos sostienen que el dinero era el pago de un rescate por la libertad de cuatro estadounidenses detenidos en Irán. Cuestionado sobre el pago a principios de este mes, Obama respondió: «No pagamos el rescate no lo hicimos aquí … Y nosotros no lo haremos en el futuro…»
Según los voceros del gobierno Irán había pagado a EE.UU $ 400 millones por la compra de equipos militares en la década de 1970, pero el gobierno iraní fue derrocado y el equipo no fue entregado.
Las explicaciones tienen críticos insatisfechos dentro y fuera del Congreso. Trump ha comenzado diciendo a sus seguidores en los mítines de su campaña que Obama «abierta y descaradamente» mintió sobre los prisioneros. El Presidente de la Cámara, Paul Ryan, R-Wis., dijo que Obama ha establecido un «precedente peligroso» y debe dar al público una «rendir cuenta de sus acciones.»
De acuerdo con el Centro de Investigación Pew, Obama se dirige a su retiro, por lo que se espera un gran esfuerzo de su parte para impulsar a Clinton a la Casa Blanca, con la mejora de su imagen pública. Su índice de aprobación se sitúa en el 53 por ciento, en comparación con el 42 por ciento de desaprobación, casi las mismas cifras que registraba poco antes de las convenciones políticas de Julio.
Pero la posición de Obama entre los votantes independientes ha llegado a territorio positivo por primera vez desde diciembre de 2012. Cincuenta y tres por ciento de los independientes aprueba la gestión de Obama, mientras que el 40 por ciento lo desaprueba. Los independientes se habían dividido en 46 por ciento a favor y 46 por ciento en contra en junio.
Obama no va a pasar mucho tiempo en la Casa Blanca después de unas vacaciones en el que jugaba al golf o fue a la playa casi todos los días.
Después de visitar Louisiana, la cabeza del presidente estará puesta la Cumbre Para la Protección del Medio Ambiente de Lake Tahoe , Nevada, el 31 de agosto. Luego seguirá con el viaje a China y Laos dl 2 al 9 de septiembre.