Imágenes satelitales analizadas por expertos muestran que se han intensificado los trabajos de construcción en una nueva estructura de gran tamaño dentro de un recinto crucial para el programa de armas atómicas que desde hace tiempo se sospecha que mantiene Israel.
Podría tratarse de un nuevo reactor o una instalación para ensamblar armas nucleares, señalaron, pero el secreto que rodea al programa hace que sea difícil saberlo con certeza.
El trabajo en el Centro de Investigación Nuclear Shimon Peres Negev, cerca de la ciudad de Dimona, renovará las preguntas sobre la condición asumida de Israel como el único estado con armas nucleares en Oriente Medio.
También podría atraer críticas internacionales, especialmente porque se produce después de que Israel y Estados Unidos bombardearan recintos nucleares en Irán en junio debido a sus temores de que la República Islámica pudiera usar sus instalaciones de enriquecimiento para desarrollar un arma atómica. Entre los sitios atacados se encontraba el reactor de agua pesada de Irán en Arak.
Siete expertos que examinaron las imágenes dijeron que creían que la obra estaba relacionada con el programa de armas nucleares de Israel, del que hay sospechas desde hace mucho tiempo, dada su proximidad al reactor en Dimona, donde no existe una planta de energía civil. Sin embargo, estaban divididos sobre lo que podría ser la nueva estructura.
Tres dijeron que la ubicación y el tamaño del área en construcción y el hecho de que parecía tener múltiples pisos hacían que la explicación más probable para el trabajo era la construcción de un nuevo reactor de agua pesada. Esos reactores pueden producir plutonio y otro material clave para las armas nucleares.
Los otros cuatro reconocieron que podría ser un reactor de agua pesada, pero también sugirieron que el trabajo podría estar relacionado con una nueva instalación para ensamblar armas nucleares. Rechazaron hacer afirmaciones definitivas dado que la construcción aún estaba en una etapa temprana.
«Probablemente sea un reactor; ese juicio es circunstancial, pero esa es la naturaleza de estas cosas», dijo Jeffrey Lewis, un experto del Centro de Estudios de No Proliferación James Martin en el Instituto de Estudios Internacionales de Middlebury, quien basó su evaluación en las imágenes y la historia de Dimona. «Es muy difícil imaginar que sea otra cosa».
Israel no confirma ni niega tener armas atómicas, y su gobierno no respondió a las solicitudes de comentarios. La Casa Blanca, que es el aliado más firme de Israel, tampoco respondió a las solicitudes de comentarios.
Años de trabajos de construcción
La Associated Press informó por primera vez sobre las excavaciones en la instalación, unos 90 kilómetros (55 millas) al sur de Jerusalén, en 2021. Entonces, las imágenes satelitales solo mostraban a trabajadores cavando un agujero de unos 150 metros (165 yardas) de largo y 60 metros (65 yardas) de ancho cerca del reactor original de agua pesada del sitio.
Imágenes tomadas el 5 de julio por Planet Labs PBC muestran que los trabajos se han intensificado. Parece que se están colocando muros de contención de concreto grueso en el lugar, que tendría múltiples pisos subterráneos. Varias grúas se alzan sobre el lugar.
Por el momento no hay una cúpula de contención u otras características visibles típicamente asociadas con un reactor de agua pesada. Sin embargo, se podría agregar una más tarde o podría diseñarse un reactor sin ella.
El actual reactor de agua pesada de Dimona, que entró en funcionamiento en la década de 1960, lleva operando mucho más tiempo que la mayoría de los reactores de la misma época. Eso sugiere que necesitará ser reemplazado o reacondicionado pronto.
«Es alto, como cabría esperar, porque el núcleo del reactor va a ser bastante alto», dijo Lewis. «Basado en la ubicación, el tamaño y la falta general de construcción allí, es más probable que sea un reactor que cualquier otra cosa».
Edwin Lyman, un experto nuclear de la Unión de Científicos Preocupados con sede en Cambridge, Massachusetts, también dijo que la nueva construcción podría ser un reactor en forma de caja que no tiene una cúpula de contención visible, aunque reconoció que la falta de transparencia hacía difícil estar seguro.
Israel «no permite ninguna inspección internacional o verificación de lo que está haciendo, lo que obliga al público a especular», dijo Lyman.
Aunque los detalles sobre Dimona siguen siendo secretos muy guardados en Israel, un denunciante en la década de 1980 reveló detalles y fotos de la instalación que llevaron a los expertos a concluir que Israel había producido docenas de ojivas nucleares.
«Si es un reactor de agua pesada, están buscando mantener la capacidad de producir combustible utilizado que luego pueden procesar para separar plutonio para más armas nucleares», dijo Daryl G. Kimball, director ejecutivo de la Asociación de Control de Armas con sede en Washington. «O están construyendo una instalación para mantener su arsenal o construir ojivas adicionales».
Se cree que el programa de Israel depende de los subproductos de un reactor de agua pesada
Se cree que Israel, al igual que India y Pakistán, depende de un reactor de agua pesada para fabricar sus armas nucleares. Los reactores pueden utilizarse con fines científicos, pero el plutonio, que causa la reacción en cadena nuclear necesaria en una bomba atómica, es un subproducto del proceso. El tritio es otro subproducto y puede utilizarse para aumentar el rendimiento explosivo de las ojivas.
Dado el hermetismo del programa israelí, sigue siendo difícil estimar cuántas armas nucleares posee. El Boletín de Científicos Atómicos en 2022 estimó el número en alrededor de 90 ojivas.
Obtener más tritio para reemplazar el material en descomposición puede ser la razón de la construcción en Dimona, ya que Lyman señaló que se descompone un 5% cada año.
«Si están construyendo un nuevo reactor de producción», dijo, «no necesariamente significa que estén buscando expandir el plutonio que tienen, sino fabricar tritio».
Israel tiene una política de ambigüedad nuclear
Se cree que Israel comenzó a construir el recinto nuclear en el desierto a finales de la década de 1950 después de enfrentar varias guerras con sus vecinos árabes tras su fundación en 1948 a raíz del Holocausto.
Se cree que su política de ambigüedad nuclear ha ayudado a disuadir a sus enemigos.
Es uno de los nueve países confirmados o que se cree que tienen armas atómicas y uno de los cuatro que nunca se han unido al Tratado de No Proliferación Nuclear, un acuerdo internacional histórico destinado a detener la proliferación de armas nucleares. Eso significa que el Organismo Internacional de Energía Atómica, la agencia de control nuclear de las Naciones Unidas, no tiene derecho a realizar inspecciones en Dimona.
Al ser consultado sobre la construcción, el OIEA con sede en Viena reiteró que Israel «no está obligado a proporcionar información sobre otras instalaciones nucleares en el país» aparte de su reactor de investigación Soreq.
Fuente: JON GAMBRELL Associated Press